En esencia, Karma Yoga es cumplir con tu deber sin apegarte al resultado. El resultado puede ser bueno o malo, pero eso nunca debe ser tu preocupación. Cuando realizas un karma o una acción, debes poner todo en ello. Pero una vez que está fuera de tus manos, debes romper todos tus apegos para que no te afecten los resultados.
Karma Yoga, al igual que otros yogas (Bhakti Yoga, Jnana Yoga y Raja Yoga), purificará tu mente y te llevará a la liberación espiritual. Esto te va a conducir finalmente a reducir el estrés mediante posturas fáciles y meditación, sin olvidar el siempre efectivo trabajo de tonificación del cuerpo a través del movimiento.
Los principios de Karma Yoga son los pilares sobre los que se asienta esta forma de yoga. Te hacen entender y practicar yoga. Primero está una actitud correcta. No importa si estás dirigiendo una empresa o haciendo labores de casa. Lo que importa es que estás haciendo un trabajo.
No te preocupes por el tipo de labor que estás realizando, sino en si lo estás haciendo con la actitud correcta o no. Cuando trabajas, tu enfoque debe estar en la acción, no en el motivo. Si tienes un motivo, significa que estás apegada al resultado de una forma u otra. El apego tiene sus raíces en el ego. Si no sueltas el apego, nunca podrás liberarte del ego.
Pero dejar ir el ego no significa que tengas que olvidarte de ti misma. Al contrario, siempre debes servirte a ti misma primero. Si no puedes ayudarte a ti misma, si no puedes cuidarte a ti misma, nunca podrás ayudar a los demás. El Karma Yoga dice que todo lo que hagas de alguna manera se reflejará en tu futuro. No importa cuál sea tu trabajo, lo importante es dar lo mejor de ti misma para que puedas sentar una base firme para un mejor mañana.
Del mismo modo, tienes que aprender a respetar el resultado sin dejarte afectar por él. Una vez que llegue la consecuencia de tus acciones, da un paso atrás, analiza lo que sucedió y por qué sucedió, y luego respétalo con todo tu corazón. Lo importante es el camino, no el final del trayecto.
Esta antigua forma de yoga no es solo para leer en las escrituras. Cuando te entregas por completo a la tarea que tienes entre manos, no solo lo haces por el simple hecho de hacerlo, sino que también aprendes muchas habilidades nuevas. Con el tiempo, te vuelves mejor en hacer ese trabajo.
Una cosa es pasar el tiempo y otra totalmente diferente vivir tu vida. Te mantienes activa cuando vives tu vida. Y Karma Yoga te ayuda con eso. Cuando te mantienes activa para concentrarte en tu trabajo y las horas extras, se convierte en un hábito tomar conciencia de todo lo que haces.
Cuanto más te desapegas de los resultados, más los consigues. Suena como una paradoja, pero sin embargo es cierto. Imagínatelo: cuando haces un trabajo dando todo tu esfuerzo, sin preocuparte cada minuto por el resultado, ¿no es más fácil lograrlo? De hecho, muchas personas hacen lo mismo sin darse cuenta de que lo que están haciendo es un principio clave del Karma Yoga.
Cuando no estás apegada a los resultados, no experimentas tristeza o ira por lo que suceda. Karma Yoga te hace más flexible. La mayoría de las personas experimentan que después de un largo período de práctica de Karma Yoga, se notan más calmadas y, por supuesto, sin la carga de estrés que tenían.
No necesitas unirte a algunas clases de yoga o aprender algunas poses de Karma Yoga. Es más un cambio de mentalidad que alguna actividad física. Haz una lista con todos los trabajos y deberes principales que tienes en tu vida. Mientras los escribes, encontrarás algunos trabajos que no disfrutas en absoluto, pero tienes que incluirlos también.
Prioriza las obras según su importancia. Darse cuenta de su urgencia es un excelente comienzo. Vendrán muchos obstáculos que estarán fuera de tu control. No te preocupes por ellos. Si no puedes hacer un trabajo, pasa al siguiente sin preocupaciones. Es cuestión de prioridades.
En realidad, no hay posturas de Karma Yoga, sino solo una disciplina de la mente. Primero, trata de entender qué es Karma Yoga y luego incorpóralo tanto a tu rutina diaria como a tu actitud ante la vida. Las posturas son las más fáciles posibles para ti. Con el tiempo, experimentarás un mejor cambio en ti misma de adentro hacia afuera.
20 de enero-18 de febrero
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