Restaurantes, viñedos y sol: las recomendaciones que necesitas para hacer de tu escapada a Las Palmas de Gran Canaria un viaje inolvidable

Ahora que ya hemos dejado atrás el primer puente del otoño, pero nos quedan otros por delante, es buen momento para planear una escapada gastronómica que nos ayuda regresar a la rutina con el mejor sabor de boca. Y aunque posibilidades hay muchas, nosotras apostamos por un destino en el que, además del mejor de los descansos, vas a encontrar estrellas Michelin, denominaciones de origen que tienes que conocer y una ciudad llena de encanto: Las Palmas de Gran Canaria.

Porque cuando uno piensa en las islas Canarias a veces se equivoca y no ve más allá que sol y playa. Sin embargo, la capital de la isla de Gran Canaria es un destino gastronómico reconocido por los que más saben, en el que familias y pequeñas empresas trabajan por dar a conocer sus productos autóctonos, ya sean quesos o vinos, y la buena cocina nos regala experiencias inolvidables.

Así que si tu también te apuntas a conocer la otra cara de una preciosa isla, a descubrir un lugar que siempre has querido visitar, o simplemente quieres añadir estrellas a tus experiencias culinarias sin moverte demasiado, sigue leyendo, porque tenemos el plan perfecto para hacer de tu escapada un viaje inolvidable.

Si lo que buscamos es buena gastronomía, descanso y un lugar que nos permita conocer la ciudad con comodidad, nuestro destino es Santa Catalina, a Royal Hideaway. Un hotel ubicado en un enclave tranquilo, junto al parque Doramas de la capital, con preciosas piscinas y una terraza con vistas de escándalo, desde el que podemos visitar enclaves como el barrio de Vegueta, en el que encontraremos algunos de los edificios y calles más importantes de Las Palmas de Gran Canaria.

Inaugurado en el siglo XIX, el Santa Catalina, a Royal Hideaway ha sido reconocido como uno de los mejores hoteles históricos de Europa, y desde su apertura ha acogido a reconocidas personalidades del mundo de la cultura y la política, como Maria Callas, Agatha Christie, Winston Churchill e incluso a los Reyes de España.

Doscientas cuatro habitaciones, con vistas a la ciudad o al precioso parque que lo rodea, en las que la comodidad y la satisfacción del cliente son la máxima de todo el personal, siempre atento a cualquier necesidad. Seleccionado en 2022 como Mejor Hotel de España en los World Luxury Award, el Santa Catalina, a Riyal Hideaway, alberga en su recinto dos de lo mejores enclaves gastronómicos de la ciudad, MuXgo y Poemas by Hermanos Padrón.

Galardonado con la primera Estrella Verde Michelin de Canarias, la propuesta gastronómica del chef grancanario Borja Marrero se centra en la cocina circular, el producto km 0 y la tradición. Y al igual que el Santa Catalina, a Royal Hideaway, quiere mostrar que es posible disfrutar de las Islas Canarias de otra manera, MuXgo es la prueba de que una cocina sostenible y preocupada por su entorno está al alcance de la mano de quien se lo proponga.

Como en este caso Marrero, que lleva su vínculo con la isla a las preparaciones que con tanto mimo elaborna él y todo su equipo, y en las que se unen los productos de la tierra con su deseo de proponer creaciones en las que los sabores canarios estén presentes en diferentes formas. Cuatro menús con los que el cliente puede abrazar la identidad canaria tanto como desee, el nivel de satisfacción siempre será el mismo.

Corteza de pino canario, berenjena a la llama con holandesa de vinagrera, sopa de queso tibia ligada con bienmesabe, rancho canario o pie de tunera (un tipo de cactus) son algunos de los platos que elaboran a partir de productos de producción propia o que se encuentran en las islas. Una experiencia gastronómica imprescindible para quienes busquen propuestas diferentes, que sorprenden y muestran nuevos sabores, mientras además se apuesta por la sostenibilidad.

Situado también dentro del Santa Catalina, a Royal Hideaway nos encontramos el primer establecimiento con una estrella Michelin de Las Palmas de Gran Canaria, Poemas by Hermanos Padrón. Una propuesta culinaria de Juan Carlos y Jonathan Padrón que, con la chef herreña Icíar Pérez al frente, une texturas y sabores para regalar al comensal una experiencia en la que cada plato es una creación en la que todo tiene su razón de ser.

Una cocina de autor cosmopolita pero no estrafalaria, sencilla pero con detalles que la engrandecen, innovadora pero respetuosa con el producto y con el cliente, la experiencia gastronómica de Poemas by Hermanos Padrón es el encuentro con el saber hacer culinario que cualquier amante de la buena cocina debe probar. Al menos una vez en la vida.

Del turrón de morcilla canaria y praliné de almendra a la inolvidable anguila a la Benedictine, pasando por la caracola de apio, sus tartaletas de choco o sus tomates encurtidos, todo en Poemas by Hermanos Padrón tiene su razón de ser para que, al terminar la velada, y con la ayuda de un maridaje canario impecable y un servicio a la altura, el cliente se lleve el mejor recuerdo posible, el del buen sabor que deja una gran experiencia.

Tres veces, tres, aparece mencionado el vino canario en las obras de William Shakespeare, de quien se dice que disfrutaba de él comprándolo de contrabando. Ahora no es necesario llegar a eso si nos acercamos a Las Palmas de Gran Canaria y apostamos por las uvas autóctonas en una buena degustación de vinos, que puede disfrutarse en el mercado de Vegueta, o queremos saber más sobre la tradición vinícola de la isla.

Para esto último es ideal acercarse a Bodegas Mondalón, una empresa familiar situada en el término municipal de la capital de la isla, en la que llevan más de tres décadas trabajando para recuperar las variedades autóctonas, como la malvasía, presente en el canary wine que tanto le gustaba al escritor inglés y donde a través de visitas guiadas podemos conocer mejor su trabajo.

Listán negro para su exquisito rosado o albillo criollo para su vino blanco son algunas de las uvas que contacto cariño trabajan y convierten en caldos presentes en los mejores restaurantes de la ciudad. A ver si pronto nos permiten viajar con líquidos y podemos traernos a la Península un sorbo de la tierra canaria, una copa de su rico patrimonio varietal, nacido sobre suelo volcánico, que ha evolucionado gracias al cariño de quienes lo trabajan y a la influencia de los elementos que hacen de Canarias un lugar único en el mundo.