Influencers del desamor: compartir penas y rupturas en redes sociales ayuda a superarlas... y a ganar visualizaciones, seguidores y engagement

Narran en redes sociales los detalles de sus separaciones, suben vídeos en los que las lágrimas son un accesorio y convierten el duelo en tendencia. ¿El desamor todo lo cura?

Fotograma de la serie 'Alguien extraordinario' (Netflix). / DR

Marita Alonso
Marita Alonso

Al abordar los asuntos amorosos, hay dos corrientes opuestas en el mundo de las redes sociales . Por un lado se encuentran los defensores del 'soft launching', los que tras abrir las puertas de sus relaciones sentimentales a sus seguidores y comprobar lo que ocurre cuando terminan ante la mirada de los followers, relegan a un segundo plano los asuntos del corazón en el universo digital. En el lado opuesto están quienes no solo documentan cada fase de su relación, sino que se esfuerzan en inmortalizar cada paso de su ruptura sentimental . Son los influencers de las rupturas y los distinguirás por sus vídeos repletos de lágrimas.

Con ellos ha nacido el ' sadfishing', la respuesta al cambio de códigos en Instagram, que lejos de abrazar la perfección, se recrea en la tristeza. «A veces son discursos un poco vacíos. Es importante que sepamos llevarnos bien con nuestra vulnerabilidad y no solo desde la parte racional que nos dice: 'Puedes permitirte ser tú', sino realmente siéndolo. Hemos aprendido que mostrarnos es sano, pero seguimos teniendo reticencias a hacerlo. Ser duro vende mucho y nos hace sentir un falso empoderamiento. Creo que l a visibilidad que se da últimamente a la salud mental está ayudando a que las personas se vean más capaces de hacerlo», asegura Laia Sabaté, psicóloga colaboradora de Badoo.

Quienes suben vídeos explicando cada fase de la separación y del proceso de sanación dan la espalda a los formatos glamurizados que las redes habían defendido hasta ahora para apostar por un contenido más crudo, cuya finalidad es ayudar a los demás a superar sus rupturas... al tiempo que suman likes, por supuesto. Solo en TikTok, los vídeos con el hashtag #breakuptiktok cuentan con más de 900 millones de visualizaciones.

¿El dolor, hablado y compartido, duele menos?

¿Mostrar el dolor durante una separación puede ayudar a nuestra recuperación? « Compartir las emociones ayuda a procesarlas. Me hace hablar de ellas, ordenar mis ideas y empezar a mirar a esas emociones cara a cara para superarlas. Al compartirlas, me doy cuenta de qué tiene sentido y qué no, y me ayuda a superar bloqueos. El dolor, hablado y compartido, duele menos. Dicho esto, prefiero que ese ejercicio tenga lugar dentro de mi círculo de confianza que públicamente en las redes, porque en la esfera pública las cosas se pueden interpretar de forma muy distinta a cómo estoy intentando expresarlo», explica Ferran Ramon-Cortés, autor de 'A 1.778 km de distancia' (Conecta).

El libro 'A 1.778 km de distancia' (Conecta), de Ferrán Ramon-Cortés. FOTO: DR

Las nuevas generaciones creen que la tecnología, que tiene una enorme influencia sobre su vida en pareja, juega a su favor en sus relaciones. Creen que «las redes sociales promueven un mayor control y supervisión sobre las acciones de la pareja, al tiempo que se convierten en generadoras de celos ante la conciencia de la mayor posibilidad y facilidad para ligar», como señala el estudio 'La gestión de la intimidad en la sociedad digital', realizado por Félix Requena Santos y Luis Ayuso Sánchez.

Teniendo en cuenta que esa mayor visibilización de la vida en pareja, no es extraño que cada vez haya más personas que convierten sus separaciones en contenido de sus publicaciones. Pese a ello, quien tiene el corazón roto ¿realmente encontrará ayuda en estos contenidos o, al comparar cómo algunos se recuperan antes, se sumirá en una tristeza mayor? En general, nos ayuda ver a otras personas sintiendo lo mismo.

Peligro: no hay que caer en la retroalimentación

«Hay cosas que pasan en todas las casas y que seguimos pensando que solo nos pasan a nosotros –aclara la psicóloga Laia Sabaté–. Me parece muy bonito que podamos compartir con los demás y ayudarnos. Hay personas a las que quizás no les va bien, porque tienden a compararse y a verse a sí mismos en negativo. En este caso, es importante ser honesto con uno mismo y revisar qué nos lleva a compararnos. Muchas veces, puede haber una mezcla entre la presión social por estar bien y nuestra propia presión por el rechazo que sentimos cuando nos sentimos mal. Es natural compararse, pero es importante entender qué función tiene para nosotros. Si la función es entendernos mejor o aprender, estará genial. Si es siempre exigirnos y criticarnos, necesitamos trabajar nuestra autoestima», señala.

Imagen del TikTok de Courtney Snells.

«Hemos de evitar caer en círculos cerrados de retroalimentación: grupos que se recrean en el dolor y se sumergen en un pozo colectivo del que es difícil salir. Tenemos que ver que hay personas que pasan por lo mismo (normalización), pero hemos de evitar engancharnos a ello (perpetuación)», añade Ferran Ramon-Cortés.

En estas historias nadie termina comiendo perdices, pero sí consiguiendo visualizaciones y, con el tiempo, una tirita con la que cubrir una nueva brecha en el corazón. Si las redes muestran pedidas de mano, bodas e incluso nacimientos, ¿por qué no iban a visibilizar también los tropiezos sentimentales?

20 de enero-18 de febrero

Acuario

Con el Aire como elemento, los Acuario son independientes, graciosos, muy sociables e imaginativos, Ocultan un punto de excentricidad que no se ve a simple vista y, si te despistas, te verás inmerso en alguno des sus desafíos mentales. Pero su rebeldía y su impaciencia juega muchas veces en su contra. Ver más

¿Qué me deparan los astros?