Jennifer Hermoso: del beso de Luis Rubiales al contundente comunicado oficial (y el apoyo de la FIFA), así ha sido la semana más intensa de la campeona del mundo

Han pasado cuatro días desde que la selección de fútbol femenina levantara la copa del mundo de fútbol. Cuatro días también desde que Luis Rubiales le plantara un beso en la boca a Jennifer Hermoso y desatara la polémica en torno a uno de los momentos más incómodos ( hubo alguno más ) que ha dado este mundial y que sigue trayendo cola. La FIFA acaba de anunciar la apertura de un procedimiento disciplinario a Luis Rubiales, presidente de la Real Federación Española de Fútbol, por los hechos ocurridos el 20 de agosto de 2023 en la final del Mundial de Fútbol femenino. Y es una advertencia seria porque lo que sucedió el domingo con Jenni Hermoso podría constituir violaciones del artículo 13, apartados 1 y 2, del Código Disciplinario de la FIFA.

Este miércoles, la futbolista de Carabanchel emitía un comunicado a través de sus fuentes oficiales: «Mi sindicato FUTPRO, en coordinación con mi agencia TMJ se están encargando de defender mis intereses y ser los interlocutores sobre este asunto», explicaba Hermoso al principio de un texto que expresa «nuestra firme y rotunda condena ante conductas que atenten contra la dignidad de las mujeres».

La deportista pide a la Real Federación Española de Fútbol que implemente protocolos necesarios y que adopte medidas ejemplares para que situaciones de este tipo no vuelvan a repetirse. También apela al Consejo Superior de Deportes para que apoye y promueva activamente la prevención e intervención ante el acoso o abuso sexual, el machismo y el sexismo.

El texto recoge además un mensaje explícito para los que están en puestos de responsabilidad, para las cabezas visibles del excelente trabajo de las jugadoras: «Es esencial que nuestra selección, actual campeona del mundo, esté siempre representada por figuras que proyecten valores de igualdad y respeto en todos los ámbitos».

Pocas veces 96 horas pueden albergar tantas emociones, sensaciones, kilómetros y hasta cambios de estación. Jennifer Hermoso empezó el domingo, 21 de agosto, con los ocho grados que marcaban los termómetros de Sídney. Es invierno allí y, en el mejor de los casos, el mercurio (¿se puede decir esto aún en la era digital?) sube hasta los 17.

Después de un día de nervios (el partido comenzaba a las ocho de la tarde, hora australiana), la madrileña se enfrentaba a los 90 minutos (luego fueron muchos más con el añadido de los 13 minutos extra) más decisivos de su vida .

En el minuto 69 llegó el pico de tensión. Hermoso era la encargada de lanzar un penalti a favor de España que podía haber tranquilizado a la selección (con un 2-0 difícil de remontar) y a los millones de aficionados que seguían el partido. Pero falló. Luego llegaría la polémica sobre si la guardameta estaba adelantada, si tendrían que haberlo revisado en el VAR, si se tendría que haber repetido el lanzamiento...

Lejos de hundirse, Jennifer siguió jugando a máximo rendimiento y siendo una de las figuras claves de la selección que se alzaría con la victoria, el campeonato y la copa. Y después llegó el momento de las felicitaciones, pasar por la tribuna, saludar a la reina Letizia y a la infanta Sofía que estuvieron apoyando a la selección , y el beso de la polémica.

Mientras la bola del 'caso Rubiales' se iba haciendo cada vez más grande, la selección puso rumbo a casa. Jennifer junto al resto de sus compañeras (también ha sido un campeonato intenso para Olga Carmona que conoció el fallecimiento de su padre justo después del partido) llegaba a Madrid. La ciudad se volcó para celebrar una gesta que fue festejada hasta altas horas de la madrugada.

Si conseguir la copa del mundo había sido un sueño cumplido para la madrileña, poder compartir escenario con su grupo favorito, fue otro. Ambos realizados en 48 horas. No está mal. «Yo venía aquí por todos vosotros y porque estaba Camela, pero no los veo», decía la futbolista entre bromas desde el escenario antes de que subieran los integrantes de la banda. Y entonces aparecieron Dioni y Ángeles y todo fueron abrazos, risas y canciones. La jugadora se atrevió incluso a entonar alguno de los temazos de los reyes de la tecnorumba.

Tras el baño de multitudes del lunes, llegó el momento institucional del martes. La Roja era recibida en Moncloa por Pedro Sánchez. En su intervención, el jefe del Ejecutivo anunciaba la concesión, por parte del Consejo de Ministros, de la medalla de oro de la Real Orden del Mérito Deportivo a cada una de las deportistas; y la placa de oro para el conjunto de la selección y el equipo técnico. También tenía unas palabras para el comportamiento de Rubiales: «Es inaceptable y sus disculpas son insuficientes».

Ese mismo martes, tras encontrarse con el presidente en funciones, las jugadoras llegaban a Ibiza en un vuelo chárter. Jennifer, como el resto de las jugadoras, ha ido relatando su estancia en la isla a través de sus Stories de Instagram: momentos de relax en la cubierta de un barco, baños en las transparentes aguas del Mediterráneo, las famosas puestas de sol ibicencas y el fiestón que les montaron en Ushuaia.

La fiesta en el club propiedad de la familia Matutes tenía lugar en la noche del miércoles, después de una jornada de relax y pádel surf (la propia Jenni hizo sus pinitos), pero no era la primera y seguramente tampoco sea la última. La noche anterior, en otro de los clubs míticos de la isla, una enorme tarta volvía a recordarlas que son campeonas del mundo. Amnesia se volcó con las jugadoras, y su estrella también: Bizarrap, conocido entre otras cosas por romper todos los récords con su canción con Shakira, era el encargado de poner la banda sonora a la velada.

Así llegamos a este 24 de agosto. Mientras el comunicado de Jennifer Hermoso copa la actualidad informativa, otras voces se van sumando a la de la jugadora. Si primero fue Tamara Ramos, directora general de Futbolistas ON, la que señalaba las «vergonzosas actitudes» de Rubiales en El programa del verano de Telecinco, ahora ha sido Beatriz Álvarez, presidenta de la Liga Femenina, la que ha denunciado actitudes «machistas» y misóginas» por parte del presidente de la RFEF. «No me sorprende en absoluto, lo conozco desde hace muchos años y le he sufrido. ¿De qué color traes hoy la ropa interior? o Tú has venido aquí a ponerte las rodilleras», fueron algunas de las frases que la antigua compañera de Luis Rubiales asegura haberle escuchado.

Así están la cosas de momento y solo es jueves...