Luis Rubiales no advirtió en ningún momento lo inadecuado de su comportamiento durante la celebración de la victoria en el Mundial de la selección española de fútbol femenino. /
Luis Rubiales no ha dimitido de su cargo como presidente de la Real Federación Española de Fútbol, pese al un escándalo provocado por su comportamiento machista en el Mundial de fútbol femenino de Australia. Su salida de la RFEF no ha podido ser sido forzada y, de hecho, Rubiales sostiene que tampoco lo fue el beso que le propinó a la jugadora de la selección Jenni Hermoso . En su brutal discurso en la asamblea de la REF, sí se disculpó por los gestos obscenos que realizó en presencia de la reina Letizia y la infanta Sofía.
Rubiales mantiene otro cargo importante, vicepresidente del Comité Ejecutivo de la UEFA, que no parece peligrar. Sí puede presumir de haber provocado un MeToo en el fútbol que, por primera vez, cuenta con el apoyo de una considerable mayoría de hombres. La repulsa a los comportamientos machistas y sexistas es cada vez mayor, pese a su discurso incendiario sosteniendo lo contrario . De hecho, esta cronología con todas las reacciones a su lamentable comportamiento añade un factor clave: cada revelación, foto, vídeo, denuncia o repulsa fue viral.
La selección española de fútbol femenino gana la final del Mundial de Australia y Nueva Zelanda con un gol de Olga Carmona. Las cámaras que retransmiten el evento deportivo mundialmente captan a Luis Rubiales exultante. En ese momento de máxima alegría ya se puede ver cómo la reina Letizia sufre en propia carne la incapacidad del presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Debe sacarla 'in extremis' de una foto de grupo caótica, en la que se ve aplastada por las jugadoras.
El momento en el que Luis Rubiales besa, sin permiso, a Olga Carmona ante las cámaras de televisión. /
Nada más terminar el partido, Jenni Hermoso reacciona al indebido beso de Luis Rubiales en un 'streaming' de Instagram desde el vestuario, donde las jugadoras celebran su victoria. Antes de que las imágenes se volviera virales, la jugadora de la selección española dijo a sus compañeras: «¡Pero mírame a mí! ¿Qué hago yo? No me ha gustado nada».
Inmediatamente, las redes sociales viralizan las imágenes que comienzan a replicar medios de comunicación de todo el mundo. En ellas se puede ver cómo Luis Rubiales forzaba un beso en los labios a Jenni Hermoso, agarrándole la cabeza con ambas manos. También propinó un beso en la mejilla a Olga Carmona , igualmente sin consentimiento.
Además de los besos, un vídeo que muestra el comportamiento de Rubiales en el palco de autoridades del Accord Stadium de Sídney añade leña al fuego de este escándalo mundial. En él se puede ver al presidente de la RFEF celebrando de manera indecorosa la victoria de la selección española, junto a la infanta Sofía, menor de edad, y la reina Letizia. Luis Rubiales culminaba su fiesta llevándose la mano a los genitales, en un gesto obsceno impropio de cualquiera .
El polémico beso forzado de Luis Rubiales a Jenni Hermoso, captado por las cámras de televisión y retransmitido a todo el mundo. /
Ante la avalancha de críticas, Luis Rubiales decide intervenir en un programa deportivo en la radio para dar explicaciones. El presidente de la RFEF llama «tontos» a los que se escandalizaron por el beso forzado. «No hagamos caso de los idiotas y de los estúpidos. Un pico de dos amigos celebrando algo... de verdad, no estamos para gilipolleces. Con todo lo que he pasado, no estamos para tontos del culo. Ha habido más besos, no míos, sino de otra gente», dijo. «No me comentéis cosas de pringados que no saben ver lo positivo», insistió.
Horas después, al comprobar que sus palabras sólo habían empeorado la situación, Luis Rubiales hace público un vídeo que graba en una de las escalas del vuelo que trae a la selección española de vuelta a Madrid. Su discurso se quiere sirva como disculpa, pero la opinión pública concluye que no se trata de tal cosa, sino de justificarse en una supuesta conformidad de la víctima. «Ocurrió sin mala fe, por ambas partes», sostenía Rubiales.
Algunas personalidades del mundo del fútbol comienzan a reaccionar. Xavier Estrada Fernández, excolegiado y ahora concejal de ERC en Lérida, compartió en Twitter el protocolo de violencia sexual establecido este mismo año en la Federación. Miguel Galán, presidente del Centro Nacional de Formación de Entrenadores (CENAFE), denuncia a Luis Rubiales ante el Consejo General de Deportes por incumplimiento de la Ley del Deporte.
Ya de vuelta en Madrid, las jugadoras de la selección de fútbol femenino celebraron en una fiesta en Príncipe Pío su victoria , con la nota trágica del fallecimiento del padre de Olga Carmona en el ambiente. En el escenario no se vio a Luis Rubiales, que sí quiso posar al salir del avión con la capitana, el entrenador y el trofeo de ganadoras del Mundial. Al final de la escalerilla, en la foto de grupo, varias jugadoras se apartan del presidente de la RFEF. No quieren ser fotografiadas a su lado.
El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, recibe en Moncloa a las campeonas de la selección española . Saluda A Luis Rubiales con gelidez y, en rueda de prensa, señala el camino de la dimisión. «Fue un gesto inaceptable y las disculpas del señor Rubiales no son suficientes; incluso, no son adecuadas», sostiene. «Por lo tanto, debe seguir dando pasos para aclarar lo que vimos en los medios».
La repulsa política comienza a ganar tracción. Miquel Iceta, ministro de Cultura y Deporte; Margarita Robles, ministra de Defensa; Irene Montero, ministra de Igualdad, e Ione Belarra, ministra de Derechos Sociales y Cuca Gamarra, portavoz en el Congreso del Partido Popular valoran como «inaceptables» las imágenes y piden la dimisión de Luis Rubiales. Javier Tebas, presidente de LaLiga desliza que «llueve sobre mojado». Iker Casillas, que llegó a ser rival de Rubiales en la carrera por presidir la Federación, se pregunta en Twitter:«¿Alguien ha dimitido o no?».
La Real Federación Española de Fútbol anuncia una asamblea extraordinaria en la que Luis Rubiales pueda recibir el apoyo de los representantes a los que él mismo aupó a tales responsabilidades. Ante la dificultad de lograr su inhabilitación o dimisión que venga de la RFEF, Sumar interpone una denuncia ante el Consejo Superior de Deportes en la que solicita que sea apartado de su cargo en razón del protocolo de actuación frente a la violencia sexual.
Una investigación de Relevo destapa que Luis Rubiales y Jorge Vilda, el entrenador de la selección femenina de fútbol, presionaron a Jenni Hermoso y su familia para que saliera en el vídeo en el que el presidente de la RFEF trató de disculparse, infructuosamente. «Hazlo por mis hijas», pidió a la jugadora a la que besó sin su consentimiento. Relevo también descubrió que, ante su negativa, Rubiales y Vilda trataron de involucrar en el vídeo a la capitana del equipo, Ivana Andrés. Ella también se negó a colaborar.
Relevo descubre que las declaraciones difundidas por la RFEF la tarde del día 21, en las que Jenni Hermoso se manifestaba conforme con el beso de Rubiales, son falsas. Decían: «Ha sido un gesto mutuo totalmente espontáneo por la alegría inmensa que da ganar un Mundial. El 'presi' y yo tenemos una gran relación, su comportamiento con todas nosotras ha sido de diez y fue un gesto natural de cariño y agradecimiento. No se puede dar más vueltas a un gesto de amistad y gratitud, hemos ganado un Mundial y no vamos a desviarnos de lo importante».
Según desvela El Confidencial, Delia Rodrigo, la jueza de Majadahonda que investiga al presidente de la Real Federación Española de Fútbol por los Supercopa Files, solicita información e inicia investigaciones sobre el viaje que Luis Rubiales realizó en otoño de 2018 a Nueva York, junto a la pintora mexicana Roberta Lobeira. Fue supuestamente sufragado con fondos de la RFEF.
Luis Rubiales adujo en su discurso en la asamblea de la Real Federación Española de Fútbol que el beso a Jenni Hermoso fue consentido, «como el que le daría a una hija». /
No amaina el escándalo por el comportamiento de Luis Rubiales, al contrario. Otras mujeres dan un paso adelante y relatan la experiencias de relación laboral con el presidente de la RFEF. Tamara Ramos, directora de marketing de Rubiales cuando era presidente de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) pactó con él para no ir a juicio en 2017.
Rubiales dirigió a Ramos frases como «cállate la puta boca», «No le hagáis caso a esta preñada. Las neuronas se le han ido» o «aquí se hace lo que me sale a mí de la punta de la polla«, algunas de ellas en presencia de muchas personas más. También comportamientos del presidente »contrarios a la dignidad, con puñetazos en la mesa y patadas a las puertas«, así como exigirle tareas impropias de su puesto de trabajo, como »buscarle piso para él en arrendamiento y realizar compras personales«.
En 2014, durante su último mes de embarazo, Rubiales obligó a Tamara a «acudir con un grupo de asociados y patrocinadores a un local de ocio» a la una de la madrugada. Le ordenó «que atendiera al grupo y les llevara en su coche al hotel de regreso«. Al día siguiente la ginecóloga le dio la baja médica y un mes después nació su hija Alba.
Beatriz Álvarez, presidenta de la Liga Profesional de Fútbol Femenino, cuenta en televisión cómo Luis Rubiales le negó medidas de conciliación tras dar a luz. Le pidió reuniones por Zoom cuando estaba embarazada de ocho meses, y Rubiales le dijo «que tenía que dar ejemplo y lo que tenía que hacer era dedicarme a la crianza y dar ejemplo a la sociedad de mi maternidad«.
La Liga Profesional de Fútbol Femenino presenta su propia denuncia ante el Consejo Superior de Deportes «por los gravísimos hechos y conductas» llevadas a cabo por Luis Rubiales y solicita su inhabilitación como presidente de la RFEF. Desde la competición, lamentan «una actitud muy alejada de los valores de nuestra sociedad contra la que se viene luchando desde hace décadas» y que, por desgracia, dicen, «quedará por siempre vinculada a nuestra selección femenina».
El excolegiado de Primera División Xavier Estrada Fernández, que ya denunció el caso Negreira, interpone una denuncia ante la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) contra su presidente, Luis Rubiales.
«Mi sindicato FUTPRO, en coordinación con mi agencia TMJ, se está encargando de defender mis intereses y ser los interlocutores sobre este asunto», explicó en el comunicado que el sindicato de Jenni Hermoso distribuye a los medios de comunicación.
A través del sindicato, Hermoso pide que se tomen medidas. «Estamos trabajando para que actos como los que hemos visto nunca queden impunes, sean sancionados y se adopten las medidas pertinentes que protejan a las futbolistas de acciones que creemos son inaceptables«, mantenían allí.
«Desde FUTPRO expresamos nuestra firme y rotunda condena ante conductas que atenten contra la dignidad de las mujeres«, insiste el comunicado. «Desde nuestra asociación pedimos a la Real Federación Española de Fútbol que implemente los protocolos necesarios, vele por los derechos de nuestras jugadoras y adopte medidas ejemplares».
Miquel Iceta, ministro de Cultura y Deporte, advierte que si la Real Federación Española de Fútbol no toma medidas contra Luis Rubiales lo hará el Consejo Superior de Deportes (CSD). Lo confirmó desde la India, donde se reunían los ministros de Cultura del G20.
El Gobierno de la Comunidad de Madrid insiste al presidente de la Real Federación Española de Fútbol para que dé «los pasos necesarios» para que su comportamiento no empañe el éxito de la selección española femenina. La vicesecretaria de Política Social y Reto Demográfico del Partido Popular, Carmen Fúnez, pidió la dimisión «ya» de Luis Rubiales, voluntaria o forzada por las federaciones territoriales.
La Asociación de Mujeres Juezas apremia a la RFEF para que cese inmediatamente a Rubiales por «su comportamiento machista» Señalan que el protocolo de ese organismo contempla «el rechazo expreso» a ese tipo de actos. «El acto llevado a cabo por Luis Rubiales es claramente un comportamiento machista sobre el cuerpo de una mujer, llevado a cabo sin su consentimiento y en un contexto de relaciones desiguales de poder que afectan a la capacidad de reacción de la mujer«.
Aparecen más imágenes de Luis Rubiales celebrando de manera indecorosa la victoria de la selección española de fútbol femenino. La peor, esa en la que carga como si fuera un saco de patatas a la jugadora de la selección Athenea del Castillo.
Otro momento criticado de Luis Rubiales sobre el cesped del Accord Stadium de Sídney, cargando a Aintana Bonmatí. /
La asamblea convocada por la Real Federación Española de Fútbol para tratar la cuestión del beso de Luis Rubiales a Jenni Hermoso comienza a ponerse en cuestión por parte de ciertas federaciones, como la vasca. Otros clubes de fútbol anuncian que no acudirán a la asamblea, como el Girona, el Osasuna, el Granada, el Real Valladolid, el Sevilla, el Real Zaragoza, el Cádiz, el Athletic de Bilbao, el Sporting. A lo largo del día, los 20 clubes profesionales le dejan solo.
Algunos futbolistas como Isco Alarcón comienzan a poyar a Jenni Hermoso. «Tengo el derecho de respaldar a Jenni en este asunto. Agradezco tu valentía al tomar las medidas necesarias para evitar que esto se repita en el futuro y contribuir a una sociedad más justa de aquí en adelante», escribe Aitor Ruibal, del Real Betis.
La FIFA, el máximo organismo del fútbol Mundial, actúa por primera vez desde lo sucedido en la final del Mundial femenino y abre un procedimiento disciplinario contra Luis Rubiales por su beso a Jenni Hermoso y sus gestos en el palco. El presidente de la RFEF también actúa como vicepresidente primero de la UEFA.
Ante el clamor social, político y deportivo, se anuncia que finalmente Luis Rubiales dimitirá en la asamblea de la Real Federación Española de Fútbol convocada de urgencia. Así se filtra por parte de miembros de su equipo a los medios de comunicación.