Ester López, empresaria de belleza: «La falta de hidratación puede acelerar la pérdida de firmeza»

Bien sea por pereza o porque no está incluido en los pasos de la rutina de cuidado, en muchas ocasiones nos olvidamos de hidratar en profundidad el cuerpo. A las bajas temperaturas se unen los cambios bruscos entre interior y exterior o las calefacciones y aires que hacen que la piel esté más seca o que se produzca una sensación de tirantez.

Una piel hidratada es sinónimo de una piel cuidada y de aspecto saludable, que además tiene una barrera cutánea reforzada . Pero ¿cómo cambia el cuidado de la piel del cuerpo a la del rostro? Lo conocemos de la mano de la dermatóloga Elena Martínez Lorenzo , Ester López, empresaria de belleza y fundadora de Ali d'Aria Beauty y Noemí Bermúdez , experta en nutricosmética y CEO de Mímate Cosmetics.

Las temperaturas extremas, bien sea el calor o el frío, no son grandes aliadas de una piel saludable. Sequedad, rojeces o una función barrera alterada son algunas de las particularidades a las que se enfrentan con la llegada del frío. Explica la dermatóloga Elena Martínez Lorenzo que «con el frío se produce una alteración en la barrera cutánea y que, al estar alterada, la piel se irrita con facilidad, ya que pierde el agua producida por la propia piel».

Añade Ester López que « la circulación en la piel disminuye, lo que dificulta que la piel reciba la cantidad necesaria de nutrientes y oxígeno» por lo que provoca que «la piel se vuelva más seca, con tendencia a descamarse y que pierda más agua».

¿Afectan igual estos cambios a todas las pieles? Si bien es cierto que una piel grasa puede estar deshidratada, el frío no afecta de igual manera a todas las pieles, aunque existen algunos denominadores comunes. La dermatóloga Martínez Lorenzo enumera que «en todas las pieles con el frío, pero más aún en las pieles sensibles , existen la tendencia a la irritación que deriva en rojeces y sequedad». Otras problemáticas derivadas de la exposición a bajas temperaturas son « lesiones acneiformes y grietas, afectando todo esto a todas las pieles por igual». ¿Hay en algunas en las que se note más? Para la experta hay que prestar especial atención a «las pieles sensibles o sensibilizadas por el uso de productos irritantes como el retinol o el ácido glicólico».

En el caso de los tipos específicos de piel, considera Ester López que «las pieles sensibles son las que más sufren con el frío. Se irritan fácilmente, se enrojecen y pueden desarrollar fisuras dolorosas». Las secas son aquellas «más afectadas por la pérdida de hidratación y las normales también pueden resecarse, pero no tanto». Las pieles maduras también acusan la llegada de las bajas temperaturas y López destaca que «la falta de hidratación puede acelerar la pérdida de firmeza y elasticidad, lo que hace que sea aún más importante cuidar la hidratación en invierno».

Al igual que existen activos beneficiosos para el rostro durante los meses de invierno, el cuerpo también encontrará sus grandes aliados en la rutina. Explica Noemí Bermúdez, de Mímate Cosmetics, que «en invierno es muy importante optar por activos que ayuden a mantener la piel hidratada y mejoren la barrera cutánea». La profesional recomienda buscar productos que contengan « ácido hialurónico , glicerina, pantenol y urea que son excelentes para atraer y retener la humedad». Otros activos que funcionan son «los aceites vegetales como el de jojoba, argán o almendras que son ideales para aportar nutrición». Por último, la profesional menciona a las ceramidas que «son esenciales para reforzar la estructura de la piel y evitar la pérdida de agua».

Añade la doctora Martínez Lorenzo otros activos no tan conocidos para las pieles en invierno como son « el ácido azelaico y la niacinamida». Explica que «ayudan a reducir la inflamación y controlar el posible sobrecrecimiento bacteriano que se puede dar en estas pieles irritadas, evitando, por lo tanto, la aparición de brotes de dermatitis o acné».

Cuidar a diario la piel de nuestro cuerpo ayudará a que no tengamos brotes de dermatitis o exceso de sequedad. ¿Por qué no debemos de saltarnos este paso? «La hidratación diaria es clave porque nuestra piel está constantemente expuesta a factores que la deshidratan, como el frío, el viento y el aire caliente de los interiores» explica Noemí Bermúdez. Añade que «si no la hidratamos, pierde flexibilidad y, por ende, se vuelve propensa al envejecimiento prematuro».

Por su parte, la doctora Elena Martínez Lorenzo cree que es clave «aportar grasas, lípidos y ceramidas que ayuden a reforzar la barrera cutánea, evitando la pérdida de agua». Recomienda hidratar «en base al uso de productos que contengan ceramidas, ácidos grasos y lípidos para conseguir aportar a la barrera cutánea y, por tanto, evitar la pérdida de agua».

Existen otro tipo de recomendaciones más allá de la rutina de cuidado y de los activos que utilicemos que harán que nuestra piel esté con un aspecto saludable y que no sufra tanto con el frío. La doctora Martínez Lorenzo advierte sobre « evitar en la medida de lo posible la exposición al frío o añadir posibles actores que alteren la barrera cutánea como comidas picantes, alcohol, tabaco o exposición solar».

Contamos también con tratamientos en el mercado que pueden mejorar la piel, menciona Ester López, fundadora de Ali d'Aria Beauty que una de sus recomendaciones es «probar tratamientos como la chocolaterapia» que «ayuda a nutrir la piel profundamente. El cacao contiene antioxidantes que protegen la piel de los daños ambientales y promueven una hidratación intensa».

Concluye Noemí Bermúdez que es interesante también « mantener la hidratación interna bebiendo suficiente agua durante todo el día. Los nutricosméticos como los suplementos de colágeno y omega – 3 son una excelente opción para mantener la piel saludable desde dentro».

Ultra Body es la nueva crema corporal de la firma de cuidado. Tras el éxito de su crema facial, con este producto la piel está hidratada durante 72 horas en las condiciones más extremas. De rápida absorción, tiene una fórmula con glicoproteína glacial, proceramida, escualano y ectoína activos que fortalecen la función barrera de la piel. (48 euros)

La nueva Loción Hidratante Intensiva está indicada para las personas que tienen la piel deshidratada o muy seca y que necesitan reforzar la función barrera. Una fórmula con ceramidas e Hydro Urea que retiene el agua de la piel, proporcionando una sensación de hidratación con el paso de las horas. (22,55 euros)

Aceite de coco, cacao y manteca de karité son las claves de Butta Drop, una crema hidratante de rápida absorción que deja una sensación de hidratación en la piel con el paso de las horas. Está indicada para todo tipo de pieles y su fórmula es vegana. (Disponible en Sephora, 34 euros)

Indicada para pieles con tendencia atópica, Panthenol Confort es una loción corporal hidratante que reduce los picores, la sequedad de la piel y la picazón, que se pueden intensificar con el frío. (4,99 euros)

Delicia Drench es una manteca corporal de fácil absorción, que proporciona hidratación y que ayuda a reforzar la barrera cutánea. Su fórmula combina un complejo de calmantes prebióticos, hibisco y está enriquecido con su delicioso aroma Cheirosa 59. Se recomienda aplicar en todo el cuerpo y, en especial, en las zonas más secas. (Exclusivo en Sephora, 45,99 euros)

Crema Corporal está formulada con colágeno marino vegano, resveratrol y centella asiática, activos que proporcionan hidratación a la piel y refuerzan la función barrera que puede estar alterada en invierno. Además, cuenta con propiedades regeneradoras y cicatrizantes. (18 euros)

Loción Corporal de Manteca de Karité está formulada además con aceite de argán y ácido hialurónico. Tres activos para hidratar en profundidad la piel, que además ayudan a la regeneración del tejido celular de la dermis. (12,65 euros)

Day Dreamer es una loción hidratante de rápida absorción que también fortalece la barrera cutánea. Su fórmula vegana contiene niacinamida, aceite de jojoba y manteca de karité activos nutritivos que cuidan la piel. Está disponible en formato recargable. (Set Hidratante Corporal, 40 euros. Refill, 23 euros)