Ana de Armas posa en la alfombra roja de los premios Oscar. /
Por la alfombra roja de los premios Oscar 2023 han pasado mujeres de la talla de Nicole Kidman o Eva Longoria, sin embargo, hay una que ha generado gran expectación: Ana de Armas. La actriz, nominada por su papel protagonista como Marilyn Monroe en Blonde y que compite en la misma candidatura de Cate Blanchett al oscar , ha sido una de las estrellas de la noche dentro y fuera de la red carpet y no ha defraudado derrochando elegancia con un vestido muy especial.
Interpretar al icónico personaje de Hollywood ha llevado a Ana de Armas a estar en lo más alto de la industria cinematográfica. Recibió la noticia de la nominación con mucha emoción y orgullo y esta noche era especialmente importante para ella. Un paso muy importante en su carrera como actriz y así lo demostró en su llegada a la alfombra roja.
«Es una lástima que Marilyn nunca tuviera el reconocimiento (de la nominación al Oscars). Pero yo estoy muy orgullosa, poder interpretar su vida desde un punto de vista más íntimo y más humano. Si este es el reconocimiento, bienvenido sea», comentaba a los medios antes de la gala.
Y para una cita tan especial como esta, Ana de Armas tenía que escoger un estilismo que quedara para el recuerdo y de esos que formaran parte de la historia de la red carpet de la gran fiesta del cine. Sin embargo, lejos de escoger diseños extravagantes y llamativos, prefirió apostar por la fórmula del menos es más.
La actriz se decantó por este vestido hecho a medidad de Louis Vuitton, firma de la que es embajadora, protagonizado por un color champagne que casi se mimetizaba con el tono de la alfombra y que tenía un diseño de lo más favorecedor que resaltaba su figura y que, como siempre, le sentaba de lujo.
Un vestido con cuerpo muy ajustado de tirante fino y escote redondeado y una falda de corte sirena con cola de volantes que tenía una clara inspiración flamenca y que recuerda al traje de gitana que pronto veremos lucir a famosas e influencers en la Feria de Abril.
Pero además de ese pequeño guiño a España, país al que tiene un especial cariño por sus años de trabajo en él, el look de la actriz era especial por su tejido brillante y sus cristales bordados que daban ese toque elegante y festivo y que hacían de él una prenda perfecta para deslumbrar en los Oscar.
Ana lo combinó con unos pendientes de aro y una pulsera, joyas de la colección de Alta Joyería de la maison y poco más. Porque sí, la actriz recurrió a su versión más sencilla dejando todo el protagonismo al vestido al lucir un look beauty poco elaborado y con un efecto muy natural.
Acompañó la prenda de un maquillaje efecto no makeup en el que una sombra de ojos en tono rosado y con algo de brillo era la protagonista y peinó su melena larga con la raya al medio y una ligera onda muy rota que parecía no haber sido peinada.
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