La secretísima vida de Athina Onassis: una fortuna maldita, infidelidades y una íntima amistad con Marta Ortega

No lo ha tenido nada fácil. Pocas personas pueden encarnar mejor el espíritu de aquella expresión, 'pobre niña rica', que se aplicó en su momento a la multimillonaria Barbara Hutton , a quien interpretó Farrah Fawcett en una miniserie con ese nombre, que también sirvió para una telenovela y una canción de Paulina Rubio. Athina Onassis, sin duda, encaja en ese perfil, aunque todo parece indicar que su vida es más plácida de lo que pudiera parecer a primera vista.

En los últimos meses ha estado apartada de la vida pública y de las competiciones hípicas, en las que solía coincidir con sus amigas Marta Ortega , a cuya boda con Carlos Torreta asistió, y Carlota Casiraghi , miembros de una estirpe en la que también debemos englobar a Jessica Springsteen, Georgina Bloomberg y Jennifer Gates. Un círculo muy elitista del que salieron grandes amistades entre salto y salto. Onassis tiene una impresionante cuadra de caballos que sí ha seguido compitiendo.

Con una vida misteriosa y sin concesiones a la galería, la rica heredera, que cumplirá 40 años el próximo 29 de enero, es, muy a su pesar una figura legendaria para la prensa rosa. El último gran soponcio mediático se lo llevó con las infidelidades de su marido, el jinete brasileño Doda Miranda, de quien se divorció una vez trascendieron estas conductas que dieron carta de naturaleza a las profecías de los que la aconsejaban que no se casaran.

En septiembre de 2018, el que algunos calificaron de cazafortunas se volvió a casar en el Algarve con la presentadora Denize Severo. Al matrimonio aportaba el deportista olímpico una hija, Viviane, fruto de una relación anterior, por quien Athina había desarrollado un gran afecto. La pareja tiene un niño y una niña y comparten habitualmente imágenes de su vida en común en las redes sociales.

Dos meses más tarde, Athina Onassis hacía su reaparición en A Coruña en la boda de la presidenta de Inditex y el hijo del diseñador Roberto Torretta, pero hizo todo lo posible por pasar inadvertida. Posteriormente llegaba un infausto aniversario, el de la trágica muerte de su madre, Christina Onassis, hija a su vez del mítico naviero Aristóteles Onassis, cuyo cuerpo sin vida fue encontrado en en el country Tortugas, al norte del Gran Buenos Aires, el 19 de noviembre de 1988. Otra tragedia para una saga repleta de ellas .

La inesperada muerte de Christina Onassis dejó a Athina en manos de su padre, Thierry Roussel y la mujer de éste, Marianne «Gaby» Landhage. Aparentemente llevaban una vida más o menos idílica en Suiza, pero finalmente acabaron distanciados. El motivo más aparente era que Roussel se oponía a su boda con Doda Miranda, doce años mayor que ella, pero parece ser que el hecho de que se emancipara al alcanzar la mayoría de edad y, por lo tanto, no tuviera el control de la fortuna de su hija, podría haber sido determinante.

Athina Onassis siempre fue muy consciente de cómo había sido la relación entre su madre, Christina, y su padre Thierry. No en vano dos de sus hermanastros nacieron cuando sus padres estaban aún casados. Athina tiene solo cuatro meses más que Eric Roussel y la llegada de Sandrine fue la gota que colmó el vaso y precipitó el divorcio. Posiblemente este pasado nada edificante fuera determinante para la oposición frontal de Athina a los consejos de su padre.

Christina Onassis había rehecho su vida con el empresario argentino de origen griego Jorge Tchomlekdjoglou. Fue él quien la encontró muerta, en un contexto en el que aparentemente les iba muy bien y se habían comprometido, con planes de boda para esas mismas navidades. Hermano de María Dodero, una de las mejores amigas de Christina, murió el 23 de abril de 2019 en una clínica de Atenas. Tenía 73 años, permanecía soltero, y fue víctima de un derrame cerebral.

El que fuera portavoz de los Onassis, el abogado Alexis Mantheakis, abordó el divorcio de Athina con franqueza y manifestó que las infidelidades del jinete carioca se habían producido desde el mes posterior a la boda. Según parece, habría llevado una doble vida con una mujer que les habría aportado las suficientes pruebas como para que no hubiera margen para las dudas.

La muerte en 2021 de Alexis Mantheakis a los 68 años fue un duro golpe para Athina Onassis, pues había sido una de sus personas de confianza durante mucho tiempo. Sin embargo, en el momento de su muerte se habían distanciado. Mantheakis se había quejado públicamente de que no le había apoyado ni ayudado cuando diagnosticaron leucemia a su mujer, y señaló a la multimillonaria por haber dejado durante meses sin pensión a una anciana prima de su abuelo, pese a que en el testamento de Aristóteles Onassis quedaba estipulada esta obligación. Calificó a su antigua jefa de «muñeca de acero» y la acusó de ser «glacial» en algunas ocasiones.