La gran rivalidad entre Carmen Sevilla y Sara Montiel: Hollywood, desencuentros y la película que las enfrentó

Fueron dos mujeres que marcaron una época y que tuvieron carreras muy paralelas. Carmen Sevilla y Sara Montiel fueron dos actrices y cantantes que brillaron especialmente por su belleza. Mientras la de la sevillana era más angelical, la de la manchega era mucho más salvaje. Sea como fuere, en el imaginario colectivo ambas estrellas son legendarias, pero entre ellas se interpuso la sombra de la rivalidad.

Según parece, Carmen Sevilla tenía un contrato para protagonizar La violetera, pero después del inesperado y brutal éxito de El último cuplé, la película fue a parar a manos de Sara Montiel, que lo convirtió en uno de los mayores éxitos de su carrera. La película dirigida por Luis César Amadori arrasó en la taquilla y marcó la línea que seguiría la actriz en sus siguientes producciones cinematográficas.

Sara ya había vuelto de Hollywood, donde intervino solo en tres películas, Serenade, junto a Mario Lanza, Veracruz, con Burt Lancaster y Gary Cooper, y Yuma, que dirigiría su marido, Anthony Mann. Antonia, verdadero nombre de la artista, no se quiso plegar al férreo sistema de los estudios de Hollywood y se encontró mucho más cómoda en vehículos de lucimiento en España, con películas, en su mayoría musicales, que lograron trascender nuestras fronteras, especialmente en latinoamérica y los países del este.

Carmen Sevilla también tuvo la oportunidad de trabajar en Hollywood, pero tampoco estuvo dispuesta a abandonar nuestro país. Rodó en La Meca del Cine Spanish Affair a las órdenes de Don Siegel, y en nuestro país participó en diversas producciones estadounidenses, que habían convertido la España franquista en un plató cinematográfico, por las ventajas económicas que encontraban para rodar.

Así, Carmen Sevilla intervino en Rey de Reyes, dirigida por Nicholas Ray, y Marco Antonio y Cleopatra, junto a Charlton Heston. También compartió pantalla con Vittorio de Sica, la gran estrella masculina del neorrealismo italiano en Pan, amor y Andalucía, y brilló en un registro dramático al lado de Raf Vallone y Jorge Mistral en La venganza de Juan Antonio Bardem.

Las carreras de Sara Montiel y Carmen Sevilla fueron divergentes y a ningún productor se le ocurrió o intentó juntarlas en la gran pantalla, como sí habían hecho coincidir a Carmen con Paquita Rico y Lola Flores , tres divas de altura, que para que no se sintieran relegadas en los títulos de crédito, tuvieron que inventarse un aspa giratoria para que ninguna saliera antes que la otra.

Carmen Sevilla vio resurgir su carrera gracias al Telecupón mientras que Sara continuó casi hasta el final de sus días con sus shows por teatros, vendiendo exclusivas como su boda con el cubano Tony Hernández o desvelando su lado más pop y electrónico al lado de Fangoria en Absolutamente.

En 2003, Sara Montiel y Carmen Sevilla tuvieron un enfrentamiento un tanto desagradable después de que la primera la acusara de tener a su madre, con 99, abandonada en una residencia, aquejada de Alzheimer. Fue una mal trago para Carmen, que aseguró que su madre estaba muy bien cuidada, como lo ha estado ella todos estos años, en unas circunstancias muy difíciles para la actriz.

Siete años más tarde, en 2010, ya habían enterrado el hacha de guerra tras este momento desafortunado y Sara Montiel invitó a su 82 cumpleaños a Carmen Sevilla. Entre otros, estuvieron presentes la baronesa Thyssen , Bárbara Rey, Pedro Ruiz, Nieves Herrero y Jaime Ostos. Tres años después, el 8 de abril de 2013, moría Saritísima, el mismo día que Margaret Thatcher , lo que llevó a ambas a compartir portadas en los periódicos y aperturas en los informativos