Mikey Madison, en los premios del Sindicato de Actores. /
Aprender ruso, apuntarse a clases de baile en barra e instalarse una en su propio salón, visitar clubes de striptease y mudarse a un apartamento en la misma zona de Brooklyn donde vive su personaje en la película... Estas son algunas de las cosas que Mikey Madison eligió hacer para preparar la película que podría darle su primer Oscar a la mejor actriz por Anora. Aunque las quinielas sitúan a Demi Moore como favorita por La Sustancia , la joven intérprete también tiene opciones, sobre todo después de hacerse con el premio BAFTA.
En Anora, un sórdido remake de Pretty Woman dirigido por Sean Baker, la actriz es una joven prostituta y bailarina exótica de Brooklyn que tiene la oportunidad de vivir una historia a lo Cenicienta cuando conoce e impulsivamente se casa con el hijo de un oligarca ruso. Pero su cuento de hadas se ve amenazado cuando sus nuevos suegros llegan a Nueva York para intentar conseguir la anulación del matrimonio.
«Me eché a llorar porque pensaba: 'No hay manera de que pueda hacer esta película'», contaba Mikey Madison a The Washington Post sobre lo difícil que fue el rodaje. «Entonces me levantaba y empezaba de nuevo, escuchando grabaciones de diez horas de rusos hablando, día y noche, solo para poder absorber algo en mi cabeza mientras dormía«.
Nacida Mikaela Madison Rosberg, la actriz creció en Los Ángeles en una familia muy numerosa formada por dos padres psicólogos y seis hermanos, incluida una gemela suya. Curiosamente, todos son pelirrojos menos ella. «Mi hermana se casó con un escritor, así que creo que eso despertó mi interés por la interpretación. Siempre he sido una gran cinéfila, al igual que mi padre, así que crecí viendo todas las películas de Woody Allen, Tarantino, Sofia Coppola y Scorsese», explicaba a la revista Interview.
Pero en un momento dado, Mikey Madison tuvo que elegir entre montar a caballo y actuar. La joven californiana creció en una familia que pasaba más tiempo en los establos que en casa, ya que su abuela y su madre eran apasionadas de la equitación. Ella ha llegado a asegurar incluso que montaba a caballo antes de saber andar.
Finalmente, optó por ser actriz en lugar de amazona y su carrera despegó cuando a los 16 años la eligieron para interpretar a una de las tres hijas de Pamela Adlon en la serie Better Things. A los 19, consiguió el papel de Sadie, una de las chicas de la infame familia Manson en Érase una vez en Hollywood, dirigida por Quentin Tarantino. En 2022, interpretó a Amber en la película de terror Scream, un papel que la llevó directamente a Anora y a su primera nominación al Oscar.
Mikey Madison en una escena de la película Anora. /
A pesar de su imponente presencia en la pantalla, la actriz es reservada por naturaleza. « He sido tímida toda la vida. No podía hablar con nadie. Cuando iba a clase, tenía que prepararme mentalmente para levantar la mano», dijo en el diario Los Angeles Times, donde también lanzó un dardo a sus exnovios.
Sin que ninguna de sus relaciones sentimentales haya saltado a los medios, sí asegura que alguno de sus ex ha tratado de ponerse en contacto con ella ahora que es famosa. «Creo que algunas cosas no parecen muy auténticas. Como antiguos amigos que salen de la nada. Exnovios que me dicen: ' Oye, ¿quieres tomar un café o algo?' ¿Por qué? ¿Porque me han visto en los carteles?».
El pasado 2 de marzo, la actriz estadounidense ganaba en Londres el premio BAFTA a la mejor actriz principal. En su discurso, Mikey Madison dio las gracias al director Sean Baker, a sus coprotagonistas y a su madre. «Ella no está aquí, pero me ha llevado literalmente a cientos de audiciones, me ha ayudado a grabar muchas de ellas. Siempre me ayuda a memorizar mis líneas. Es mi compañera de escena favorita. Te quiero, mami», dijo.
También quiso dedicar «un momento a la comunidad de profesionales del sexo. Solo quiero decir que os veo. Merecéis respeto y decencia humana. Siempre seré vuestra amiga y aliada, e imploro a los demás que hagan lo mismo», antes de revelar el no muy buen consejo que le había dado la estrella del cine Robert De Niro antes de su sorprendente victoria.
Aún conmocionada tras su victoria, declaró: «Ojalá hubiera hecho un discurso mejor. Robert De Niro me dijo en un programa de entrevistas que no preparara un discurso, así que pensé que lo mejor era hacerle caso». Mikey y Robert habían aparecido juntos pocos días antes de la entrega de premios en un episodio del programa The Graham Norton Show.