Quién es Silvia Gómez Cuétara, la madrina más elegante de España (apodada La Divina): divorcios, herencia millonaria y una vida llena de glamour

Las bodas de postín nos dejan madrinas e invitadas top capaces de inspirar nuestros looks nupciales y de renovar el fondo de armario de VIPs con vidas jugosas y bien vividas. Así nos pasó con Matilde Solís al recuperarla para la actualidad gracias a las bodas de sus hijos Carlos y Fernando Fitz-James Stuart y a la redescubierta Amparo Corsini tras su asistencia a la boda de Isabelle Junot y Álvaro Falcó.

Este fin de semana en la Ciudad de México tendrá lugar otra de esas grandes bodas de la jet set, la del empresario Ramón Hermosilla con la chef mexicana Karla Covarrubias, que nos sirve para recuperar en las páginas de la prensa rosa a una de las mujeres más elegantes de nuestra geografía: Silvia Gómez Cuétara, heredera de la empresa alimentaria Cuétara, y madre del novio del enlace de este fin de semana.

Tanto Silvia Gómez-Cuétara Novoa como su hermana Mónica están tan acostumbradas a aparecer en las páginas salmón como en las del corazón. En el caso de Silvia entre sus virtudes sociales para estos medios destacan dos: tiene un porte envidiable y todos sus matrimonios (y juicios posteriores) han sido noticia.

El primero de sus matrimonios llegó en 1965 y el protagonista masculino de la boda fue el abogado Ramón Hermosilla Gimeno, famoso por ser el abogado de los Albertos ( Alberto Cortina y Alberto Alcocer ) en el escándalo económico de los 80: el caso Urbanor. Tras lidiar con su incipiente fama de socialité y tener cuatro hijos (Jaime, Ramón, Silvia y Victoria) Ramón Hermosilla y Silvia Gómez-Cuétara firmaron el divorcio en 1999.

En 2003 llegó su segundo matrimonio, esta vez con Luis García Cereceda, el promotor inmobiliario responsable de construir la urbanización de lujo La Finca en Pozuelo de Alarcón, propietario de dos empresas inmobiliarias (Lugarce y Procisa) y propietario del restaurante Zalacaín. Luís García Cereceda falleció a los 72 años dejando a Silvia Gómez-Cuétara viuda y envuelta a su pesar en un pleito por una herencia que se calculaba en 100 millones de euros. Desde el mismo momento en el que se publicaron las esquelas del fallecimiento del empresario, quedó claro que las relaciones entre su segunda esposa y las hijas de su primer matrimonio, Yolanda y Susana, estaban lejos de ser cordiales.

Su hija Yolanda, de hecho, publicó una esquela en el diario El País donde se dirigía a su padre llamándole «queridísimo emperador» y escribiendo a continuación «Su única verdadera emperatriz, Mercedes; su únicas herederas y reinas independientes por igual Susana y Yo; con sus propios reyes de corazón, Julián y Jaime, y sus príncipes mágicos, Luis, Al, FJ y Anya, ruegan una oración por su alma». El juicio sobre el reparto de la herencia de Luis García Cereceda sigue sin resolverse y, de hecho, cada vez se enreda más (con acusaciones de espionaje de por medio).

Tras el ruido mediático de la herencia de los Cereceda, Silvia Gómez-Cuétara encontró la tranquilidad dos años más tarde, en 2012, instalándose en México, Asturias y Sotogrande del brazo de su actual pareja el empresario Juan Antonio Pérez Simón, íntimo amigo de Carlos Slim y propietario (según Paris-Match) de la colección privada de arte más importante del mundo (se calcula que posee unas 2000 obras de arte). Este idilio, propiciado por el mismísimo Felipe González y por el propio Carlos Slim, llegó también con su propio chisme: mientras Silvia Gómez-Cuétara ejercía de pareja del empresario en diferentes actos sociales, en realidad, él seguía casado con su mujer de toda la vida, Josefina Carrera.

Pero como la propia Silvia dice a sus hijas, «el mundo es de los pesados» y finalmente su relación con el empresario ya no está en tela de juicio. Él ejerció de anfitrión en la discreta boda de su Jaime Hermosilla Gómez-Cuétara con Marta Nicolás que tuvo lugar en 2020 en el Palacio de Meres asturiano (a pesar de que en un inició iba a celebrarse por todo lo alto en México).

Sin lugar a dudas el empresario también estará en el enlace mexicano de este fin de semana, el del otro hijo de su pareja, Ramón Hermosilla, con Karla Covarrubias. La boda tiene de todo para convertirse en el enlace del año al otro lado del océano. No solo Silvia Gómez-Cuétara ejercerá de deslumbrante madrina, sino que evento está organizado para impresionar. El viernes los invitados acudirán al parque nacional Desierto de los Leones para la fiesta preboda. Y tras la fiesta de nueve horas del viernes, el sábado llegará la ceremonia en el exconvento de las Vizcaínas, en el centro histórico de Ciudad de México. Una ocasión a la que se espera que asistan invitados muy conocidos, como Marta Ortega y Alonso aznar. Nos morimos por ver cómo los recibirá la otra protagonista de la velada, la madrina más alegante de todas.