UNA FIGURA SINGULAR

Así es la vida de Alfonso Martínez de Irujo, el hijo más discreto de la duquesa de Alba: melómano y divorciado

Alfonso Martínez de Irujo está divorciado de María de la Santísima Trinidad de Hohenlohe-Langenburg y tiene dos hijos, Luis y Javier.

Alfonso Martínez de Irujo, en la inauguración de una exposición. / GTRES

Juanra López
Juanra López

La tradicional misa en homenaje a la duquesa de Alba el 20 de noviembre en la iglesia del Cristo de los Gitanos no contó con la presencia de su hijo Alfonso Martínez de Irujo, quien dijo a los medios de comunicación que no había acudido porque un compromiso se lo había impedido y aprovechó para despejar las dudas sobre unas supuestas tensiones con su hermano Cayetano Martínez de Irujo. Las desmintió.

Una respuesta muy acorde a su manera de ser, pues Alfonso Martínez de Irujo siempre ha sido una figura muy discreta y ha mantenido su vida personal muy apartada de los medios de comunicación, pese al linaje tan mediático al que pertenece. Segundo de los hijos de los recordados Luis Martínez de Irujo y la duquesa de Alba , trabaja codo con codo con su hermano, Carlos Fitz-James Stuart, actual duque de Alba, en la gestión económica de la Casa de Alba y es patrono de la Fundación Casa de Alba.

Para acometer tales funciones, el aristócrata acredita una formación y una experiencia excepcionales. Es Licenciado en Ciencias Económicas en la Universidad Complutense de Madrid y realizó un Máster en Economía Financiera. Durante un tiempo estuvo viviendo en París, donde trabajó para Banca Morgan, y a su vuelta a España trabajó para el Banco Saudí.

Posteriormente, el hijo de la duquesa de Alba presidió el Instituto de Empresa (IE Business School en la actualidad), y ha sido presidente de Executive Education, así como miembro del Comité Ejecutivo. Asimismo, ha sido presidente de IE Law School y Patrono de la Fundación Instituto de Empresa, sin olvidar su labor como vicedecano de la Diputación Permanente y Consejo de la Grandeza de España.

Los títulos heredados y que ha cedido a sus hijos

A propósito de sus títulos, debemos destacar que desde 1954 ostentó el título de duque de Aliaga cuando se lo cedió su bisabuelo, el duque de Híjar, pero él a su vez se lo cedió en 2015 a su hijo Luis. En la actualidad ostenta los títulos de duque de Híjar, conde de Aranda y conde de Palma del Río, los tres con grandeza de España.

En 2013 solicitó los títulos, en función del reparto que había hecho su madre, la duquesa de Alba, de conde de Ribadeo, marqués de Arani y marqués de Almenara. Este último se lo cedió a su segundo hijo, Javier. también en 2015. Respecto a la herencia de su madre, le correspondió el Castillo de El Tejado, en Calzada de Don Diego.

Alfonso Martínez de Irujo, con su madre, la duquesa de Alba, en la boda de Felipe y Letizia. / GTRES

Alfonso Fernández de Irujo se casó el 4 de julio de 1977 en Marbella con Su Alteza Serenísima María de la Santísim a Trinidad de Hohenlohe-Langenburg, hija a su vez de Cristián de Hohenlohe-Langenburg y Carmen de la Cuadra Medina. Se divorciaron en 1987 y tuvieron dos hijos, anteriormente mencionados. El primogénito, Luis Martínez de Irujo, está casado con Adriana Martín Huarte, y son padres de una hija, Mencía, que nació en 2016. Su enlace se celebró en el Palacio de Liria el 1 de octubre de 2016. El segundo de sus hijos, Javier Martínez de Irujo, contrajo matrimonio con Inés Domecq y Fernández-Govantes . Han tenido dos hijos, Sol y Alfonso.

Prueba de su enorme discreción es que en 2016 dio una entrevista al diario Abc y manifestó que s ería la primera y la última. Lo hacía con motivo de su retirada y se mostraba muy satisfecho con su desempeño profesional en este ámbito: «Han sido 32 años y aquello en lo que he podido ayudar y aportar valor añadido, pues ya lo he hecho».

Así ha logrado el aristócrata llevar una vida discreta

El aristócrata también hablaba de cómo había logrado pasar inadvertido en una familia tan popular: «No lo sé. Tal vez porque mi vida no es nada mediática. He tratado de no hacer ninguna cosa para que pudiese ser mediática, ni ir a sitios que pudiesen serlo. He procurado tener un comportamiento absolutamente discreto. Afortunadamente, no soy una persona mediática..»

Sobre lo que había heredado de sus progenitores manifestó: «De mi padre, el sentido de la responsabilidad y del deber, el comportamiento, el trabajo. Ese tipo de cosas. De mi madre recibí un poco eso, el sentido de Casa - ahora en pleno cambio con el nuevo duque de Alba-, que ella heredó de su padre. También me legó la afición por los deportes, que es algo muy británico, porque ella fue en buena medida educada aquí. Y me dejó la afición por el flamenco», manifestaba Alfonso, que también tiene entre sus grandes pasiones tocar la guitarra.