Los detalles de la boda de Marta Luisa de Noruega y el chamán Durek Verret: invitados de Hollywood, colores prohibidos y nada de fotos

La princesa Marta Luisa de Noruega , hija mayor de los reyes Harald y Sonia, se casará de nuevo el próximo 31 de agosto. Un segundo enlace para ella no exento de polémica, ya que su futuro marido es el chamán americano Durek Verrett , amigo de celebrities como Gwyneth Paltrow o Lenny Kravitz.

El anuncio de compromiso de la royal se hizo hace ya dos años, e implicó que renunciara a sus labores de representación de la Familia Real, y así dedicarse al negocio de medicinas alternativas junto a su pareja, aunque mantiene su título de princesa. Su futuro marido no recibirá ningún título ni tratamiento especial tras la boda.

Esta es la segunda boda para la princesa Marta Luisa, que estuvo casada con el escritor Ari Behn, con quien tuvo a sus dos hijas: Maud Angélica y Leah Isadora. El suicido en 2019 de su exmarido, que tenía serios problemas de salud mental, conmocionó a toda la Familia Real y a Noruega entera.

La celebración de la boda durará cuatro días, ya que los novios quieren que todos los invitados, llegados desde EE.UU. y Europa, aprovechen bien su viaje a Noruega. El lugar de celebración será Geiranger, una pintoresca y preciosa localidad frente al fiordo del mismo nombre. Los fastos comenzarán con una fiesta en los jardines del hotel 1904, uno de los escogidos para alojar a los invitados. En este primer evento, y según informa el medio noruego Se og Hør, el dress code se ha pedido a los invitados que sus estilismos sean «sexy y genial», por lo que la habrá que esperar para saber cómo se interpreta esta etiqueta tan especial.

Al día siguiente, los invitados serán bienvenidos a bordo de un barco para realizar un crucero por el impresionante fiordo. Durará unas tres horas y todos podrán disfrutarán de las impresionantes vistas desde el barco. Los novios han trabajado duro para organizar a sus invitados unos días divertidos y absolutamente inolvidables, a los que hay que sumar también un cóctel y una cena preboda en otro de los hoteles de la localidad, el Union.

El sábado 31 de agosto tendrá lugar la boda por fin, y las mujeres, a las que se les ha pedido que vistan de gala tipo red carpet de Hollywood, se les ha prohibido ir de estos colores: blanco, rosa, negro y dorado. ¿Quizás porque sean los colores del look nupcial? Los hombres tendrán que lucir esmoquin.

En la invitación de su boda, los novios han pedido a sus invitados no hacer fotos. Una restricción sorprendente y que causará más de un malestar entre los asistentes, sin duda. Pero que puede deberse o bien al deseo de mantener la privacidad de todos los participantes en las celebraciones, con famosos de Hollywood como Gwyneth Paltrow, Lenny Kravitz o Amanda Hearst entre ellos. O muy probablemente a una posible exclusiva pactada por la royal noruega y en chamán californiano con una revista internacional. Todo apunta a que será esta segunda la razón de la radical prohibición, pero tendremos que esperar para saber si finalmente hay exclusiva o no.

Marta Luisa de Noruega nació en Oslo el 22 de septiembre de 1971, y es la mayor de los dos hijos de los reyes Harald V y Sonia . Como en Noruega existe la Ley Sálica, que da preferencia a los hombres mayores sobre las mujeres, ocupa el cuatro lugar en la línea de sucesión al trono, por detrás de su hermano Haakon, el heredero , y sus sobrinos Ingrid Alexandra y Sverre Magnus. Se casó en 2002 con el escritor Ari Behn, fallecido en 2019 –se suicidó el día de Navidad– y de quien se había divorciado dos años antes, 2017. Con él tuvo a sus dos hijas, Maud Angélica, de 20 años, y Leah Isadora, de 19.

La única hija de los reyes de Noruega y su futuro marido empezaron a salir en 2019, una relación que generó mucha polémica dada la profesión del Durek Verrett. El californiano nacido en Sacramento es un chamán muy conocido entre las celebrities americanas, y su noviazgo con la hermana del heredero al trono no ha estado exento de sorpresa, crítica y, finalmente, aceptación por parte de todos, incluida la Familia Real noruega. Hasta la madre del novio ha comentado en los últimos días y de forma pública que su hijo no la ha invitado a su boda y que lamenta mucho no conocer aún a su futura nuera.

En cualquier caso, el amor entre la princesa de Noruega y el chamán parece inquebrantable. Por eso anunciaron hace dos años su compromiso, mientras que el año pasado fue un comunicado de Casa Real el que informó de la fecha concreta del enlace: el 31 de agosto de 2024. Un esperado día que pondrá la guinda a una relación por la que sus protagonistas han luchado contra viento y marea y quienes, por fin, podrán llevar a cabo esa deseada boda rodeados de familiares y amigos.