REMANSO DE PAZ
REMANSO DE PAZ
Guillermo se acerca la tumba de su madre y le deja unas flores. Ha llegado a ella con una barca. El lugar parece una pequeña isla, de vegetación silvestre, en mitad de un lago. Y allí está enclavada la tumba de Diana de Gales. Esta es la escena de la última temporada de «The Crown». Pero, ¿dónde está enterrada verdaderamente Diana? La respuesta rápida es que lo está en la finca en la que pasó su infancia, Althorp, y que hoy pertenece a su hermano, el conde Spencer. La propiedad se puede visitar, pero la tumba de Diana es inaccesible.
Tras la muerte de Diana de Gales, el 31 de agosto de 1997, en París, Charles Spencer emitió un comunicado para explicar que su hermana sería enterrada en Althorp, en Northamptonshire, donde su familia podría cuidar de forma apropiada de la tumba y ser visitada de forma privada por sus hijos, Guillermo y Harry. «Ellos pueden venir siempre que quieran y para mí es muy importante saber eso», explicaba Charles Spencer. «Y todos decidimos que era el mejor sitio para Diana». La princesa fue enterrada el 6 de septiembre de 1997.
La mayoría de los antepasados de Diana están enterrados en la iglesia de St Mary The Virgin, en Great Brighton, pero la princesa Diana no descansa en la tumba familiar, sino a 80 kilómetros de ella. En una entrevista concedida más tarde a la BBC, el conde Spencer aseguró que había estado muy preocupado por encontrar un enterramiento seguro para ella, dada la ola de aflicción que había provocado su muerte.
La zona en la que está enterrada se llama Pleasure Gardens y «es un lugar seguro y tranquilo», afirmaba su hermano. Hubo, en su día, cierta polémica sobre cuál había sido el verdadero lugar en el que descansaba Diana. Se dijo que era un lugar secreto, y que no estaba en la propiedad familiar.
Pero la realidad es que sí lo está, lo que pasa es que existe otro lugar de homenaje a la princesa en Althorp, construido en 1998, al que puede acceder el público para presentarle sus respetos. Hace unos días, Charles Spencer visitó este monumento conmemorativo y compartió una foto en Instagram, junto con el mensaje «Un rincón especial de Althorp, esta mañana». Tiene forma de templete griego y fue adquirido por el V Conde de Spencer en 1880.
Hoy lleva el nombre de Diana y exhibe su efigie y dos citas. Una de Diana: «Nada me aporta más felicidad que tratar de ayudar a los más vulnerables». La otra, hace referencia a una de las frases que pronunció Charles Spencer el día de su funeral: «Damos gracias por la vida de una mujer a la que me enorgullezco de llamar mi hermana, la única, compleja y extraordinaria Diana».
El lago en el que está enclavada esta isla se llama Oval Lake (Lago Ovalado) y fue construido en el siglo XIX para permitir a la familia patinar sobre hielo en los Inviernos. Para celebrar el entierro de la princesa se construyó una pasarela que luego se eliminó para preservar su intimidad.
El camino que lleva al Lago Ovalado está plantado con 36 robles, uno por cada año de Diana. Los árboles fueron colocados por miembros de la familia real, incluyendo a la reina Isabel y al Duque de Edimburgo. En 2017, todos los jardines se renovaron y también lo fue la isla de Diana. En ella se plantaron nomeolvides –la flor favorita de la princesa– y rododendros. Tanto Harry como Guillermo y Kate, junto con los tres hijos de éstos participaron en una segunda ceremonia de consagración del lugar.
Guillermo y Kate visitaron la tumba, en 2011, antes de su boda. Y Harry y Meghan también lo hicieron, antes de la suya, según recuerda de forma muy emotiva el príncipe en su libro de memorias «Spare». Ambos le pidieron a la princesa que les diera claridad de ideas y que les guiara y depositaron una ramo de flores.