El rey Felipe VI pasó el fin de semana en Baqueira Beret, la estación de esquí favorita de la familia real que, sin embargo, el monarca no visitaba desde 2019. /
El rey Felipe VI ha roto cuatro años de ausencia en las pistas de Baqueira Beret en un nuevo viaje de esquí con amigos y sin Letizia. Como sabemos, ni la reina ni la infanta Sofía son demasiado aficionadas a la nieve, con lo que el monarca disfruta de uno de sus deportes favoritos con la pandilla que le acompaña desde hace años. Incluye a Pedro López Quesada o su primo, Beltrán Gómez-Acebo . En ella jamás estuvo, por cierto, Iñaki Urdangarin .
Este viaje relámpago de Felipe VI al Valle de Arán coincide con la polémica que levantó la visita fugaz de Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia, su nueva pareja sentimental, a la estación de esquí. No porque esta sea territorio Borbón, sino porque el ex duque de Palma pernoctó junto a su nueva novia en el chalet de La Pleta , la residencia que sí es de uso exclusivo de la familia real.
No se terminó de aclarar totalmente si Iñaki Urdangarin tuvo o dejó de tener el permiso de Casa Real para pernoctar en el chalet de La Pleta, lo que ha provocado todo tipo de teorías sobre su presencia allí. Sin embargo, el viaje del rey Felipe VI a Baqueira podría añadir nuevas pistas a todo este embrollo que aclararían una situación rocambolesca.
Esta visita sorpresa del rey Felipe a Baqueira, un fin de semana completo en el que el monarca ha disfrutado de la nieve y de la gastronomía local con sus amigos, aclara lo fundamental. Iñaki Urdangarin no está buscando la manera de provocar a su ex familia política. De hecho, puede que su viaje a Lérida, sin esquíes y a toda prisa, se produzca por indicación de Casa Real, deseosa de que se llevara algunos efectos personales del chalet de La Pleta.
Sabemos que Iñaki Urdangarin era visitante frecuente de Baqueira y, probablemente, el personal que mantiene a punto el chalet de La Pleta habrá avisado a Casa Real de esta circunstancia. La visita del rey Felipe a estas pistas mataría varios pájaros de un tiro. Por un lado, renovaría el apoyo de la familia real a una estación que forma parte de su biografía. Por otro, reforzaría la operación borrado al ex duque de Palma que prologa su divorcio
Evidentemente, el misterioso divorcio de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin marca la salida definitiva de este de la órbita de la familia del rey y pone en marcha el mismo proceso que ya viviera Jaime de Marichalar: un borrado total de toda huella de su relación con la Corona. Empezando por las más visibles: todos aquellos objetos que pudiera haber dejado en alguna de las residencias para uso y disfrute royal.
La presencia del rey Felipe VI en Baqueira explica mucho, aunque no se ha podido confirmar que este se haya alojado en el polémico chalet de La Pleta donde días antes durmieron Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia. Como sabemos, se trata de una vivienda de lujo de tres plantas y más de 200 metros cuadrados, cedida por la empresa que explota la estación de esquí para uso de la familia real desde 1984.
Si como parece el rey Feliipe ha querido alojarse en la urbanización de La Pleta, ha podido invitar a sus amigos, ya que el famoso chalet posee sobradas habitaciones. No es el primer viaje de esquí que el monarca organiza con sus amigos. El pasado enero, la pandilla pasó un fin de semana en Sierra Nevada. Ahora vuelven a reunirse, aprovechando que los reyes viajan a Zaragoza para cumplir con varios compromisos de su agenda.
Desde su llegada, el viernes a mediodía, el rey Felipe mostró su habitual buen humor y no dudó en hacerse fotos con las personas que se atrevieron a pedirle 'selfies'. Además, cumplió rigurosamente con su disfrute gastronómico, seguramente feliz de saltarse la estricta dieta que Letizia dispone para los menús de Zarzuela. Lo confirman las crónicas: el monarca no se privó de un arroz con conejo, croquetas y leche frita.