La ruta secreta de la infanta Cristina y sus hijos en Lanzarote: sol, pescado fresco y su prima favorita

La infanta Cristina está viviendo una nueva etapa liberada y con ganas de divertirse. Tras pasar unos años difíciles a nivel personal y que concluyeron con la firma de su divorcio de Iñaki Urdangarin en diciembre del año pasado tras 26 años de matrimonio.

Ahora, la hermana del rey Felipe VI, soltera y liberada, se muestra muy feliz cada vez que aparece en público, como ha ocurrido este pasado fin de semana en una escapada a Lanzarote, donde ya estuvo el pasado mes de febrero disfrutando de sus carnavales. Ahora ha viajado acompañada dos de sus hijos, Juan y Miguel Urdangarin .

La elección de este destino no fue casual. En la isla canaria vive desde hace años Alexia de Grecia, su prima favorita además de amiga íntima desde que eran pequeñas. Y junto a ella y su marido Carlos Morales han disfrutado de unos días de sol y playa, buena gastronomía y el calor de la familia.

La hija menor de don Juan Carlos y doña Sofía está viviendo su nueva etapa de soltera con el mejor de los ánimos. Con sus cuatro hijos ya mayores de edad –Irene Urdangarin, cumplió 18 años el año pasado – y cada uno de ellos con sus vidas más o menos encauzadas, la infanta cuenta ahora con más tiempo para dedicarse a ella misma y a los suyos. Y eso es junto lo que ha hecho este pasado fin de semana. La ex duquesa de Palma hizo una escapada a la isla de Lanzarote. Y le acompañaban dos de sus hijos: Juan, el mayor nacido en 1999 y Miguel, el menor de los tres varones nacido en 2002.

El destino de estos días de relax no fue una elección casual. En la isla canaria vive desde hace años Alexia de Grecia, la prima favorita de la infanta. Hija del fallecido rey Constantino de Grecia , hermano de doña Sofía, y de su esposa Ana María, la princesa Alexia de Grecia y Dinamarca se trasladó a Lanzarote tras casarse con el arquitecto canario Carlos Morales en 1999.

Allí residen en una bonita y lujosa vivienda diseñada por el propio Morales y ubicada en la exclusiva zona de Puerto Calero, en Yaiza (al sur de la isla), y frente al mar. Y allí se han criado en el más absoluto anonimato los cuatro hijos de la pareja: Arrietta (2002), cuya madrina es la infanta Cristina, Ana María (2003), Carlos (2005), cuya madrina de bautismo fue la infanta Elena , y Amelia, la menor nacida en 2007.

Como informaba 'La voz de Lanzarote', que ha publicado una imagen de Juan Urdangarín, el grupo comió en el restaurante Casa de la Playa, en Arrieta y especializado en pescado fresco. Por la noche continuaron con su ruta gastro en el restaurante Cangrejo Rojo, un local en Puerto del Carmen y con magníficas vistas a las islas de Lobos y Fuerteventura.

Allí se les unió Arrieta, la hija mayor de los anfitriones. La familia disfrutó de croquetas caseras, un entrecot a la piedra y vino. Una elección que confirma el buen comer y buen beber del grupo, que también pasó por la conocida Bodega de Uga, ubicada en otro pintoresco paraje de la isla.

Las dos primas siempre se han llevado de maravilla. La relación entre ellas va más allá de su parentesco, de eso no hay duda. Desde jovencitas han sido cómplices de todo lo que le ocurría la una a la otra e incluso llegaron a vivir juntas en su época de solteras en Barcelona . En la capital catalana, una ciudad por la que ambas sienten especial predilección, disfrutaron de una época muy bonita. Ambas tienen la misma edad, nacieron en 1965 con apenas un mes de diferencia –la infanta es un mes mayor–, y siempre han mantenido una estrechísima relación que ha tracendido a lo estrictamente familiar.

Incluso en los momentos de mayor adversidad, que ambas han vivido aunque por motivos diferentes, las dos primas se han mantenido unidas, apoyándose mutuamente. En el caso de la infanta Elena, el caso Nóos, el encarcelamiento de Iñaki Urdangarin, además de su posterior divorcio, le ha hecho pasar unos años muy dolorosos.

Y siempre que lo ha necesitado ha contado con el aliento de su querida prima. En el caso de Alexia, otro episodio relacionado con la justicia afectó también a su tranquila y acomodada vida en Lanzarote. En 2009, su marido Carlos Morales fue imputado por delitos urbanísticos, aunque finalmente fue absuelto.

Sea como fuere, las dos primas parece que han vuelto a tener una relación más fluida posiblemente relacionada con el momento que ambas viven. Sus hijos ya son independientes y ellas pueden permitirse pasar más momentos juntas. Y la isla de Lanzarote es sin duda un paraíso al que doña Cristina vuelve siempre que puede.

De hecho, el pasado mes de febrero la infanta fue vista en la isla junto a su prima Alexia disfrutando del carnaval muy divertidas y animadas. Otro encuentro entre amigas, además de primas, que confirman la entrañable relación que mantienen y que se ha mantenido inquebrantable a lo largo de los años.