MILLONARIO Y VIOLENTO Quién es Gary Goldsmith, el polémico tío de Kate Middleton, azote del príncipe Harry y oveja negra de la familia

Kate Middleton se ha labrado una imagen impecable gracias a su esfuerzo y a la educación que le ha brindado su madre ( Carole Middleton ), pero una oveja negra en su familia ha manchado su popularidad: su tío Gary Goldsmith. Aunque ahora se muestra como el mayor defensor de su sobrina (por las últimas controversias que ha provocado el príncipe Harry ), le ha dado más disgustos que alegrías.

Lo más grave es que el británico de 58 años ha confesado que le dio un puñetazo a su mujer. Pero también se filtraron vídeos suyos cortando cocaína y repartiendo éxtasis en su Villa de Ibiza, como cuenta la revista Vanity Fair. Un reportero de News of the world, que llevaba cámara oculta, se coló en una de sus tremendas fiestas y le grabó consumiendo, ofreciendo y rodeado de prostitutas.

El hermano pequeño de Carole es un multimillonario que se dedica a encontrar talentos relacionados con el mundo digital. Ha ido ganando fama, no por su trabajo, sino por su poca discreción. Por ejemplo, documentó en su Twitter la boda de su sobrina Pippa Middleton (hermana de la princesa de Gales) y dio una exclusiva a Hello en 2013 en la que narraba las vacaciones de Kate y el príncipe Guillermo en su famosa casa en Ibiza.

En esa charla, comentó que un amigo suyo enseñó al heredero a pinchar música. «Todos tuvieron la experiencia de Ibiza, desde baños de lodo hasta (la discoteca) Pacha o aprender a mezclar música», confesó a ese medio en 2013. Ese escenario tan idílico, el hogar del veraneo, dejó de parecer un paraíso por las grabaciones del periodista que se coló. Gary trató de defenderse en el Daily Mail y dijo que algunas cosas estaban manipuladas y que otras eran broma.

Las actitudes de Gary Goldsmith han sido muy reprobadas por la prensa y la sociedad, pero la que se lleva la palma ocurrió en 2017, cuando reconoció ante un tribunal británico que había golpeado a su mujer, Julie-Ann Goldsmith. El suceso se produjo durante una pelea en un taxi, como cuenta The Times.

«La señora Goldsmith solo recuerda que su marido la golpeó en la cara con el puño cerrado. Cayó abatida al suelo y se dio con la cabeza», dijo la abogada de la acusación. Dejó a Julie-Ann inconsciente. ¿El motivo de esa rabia irracional? La esposa le había acusado de esnifar cocaína.

A pesar de estas actitudes tan reprochables, las últimas noticias se muestran como el familiar ideal, el mayor defensor de su sobrina. A Gary le duelen las habladurías, que se han multiplicado por las últimas decisiones del duque de Sussex.

Primero, saltó cuando sacaron el documental Meghan y Harry: «Creo que Kate y Guillermo se sentirán profundamente heridos. Aman a Harry, lo extrañan. Él es familia y a pesar de este ataque, creo que todavía le darían la bienvenida a él y a Meghan», aseguró.

En esta ocasión ha pasado de la clemencia al enfado por las exitosas memorias del príncipe Harry, En la sombra ( Spare). Su movimiento ha sido responder al libro (que es número uno de ventas en todo el mundo) de una manera similar, ha redactado su propio texto para el Daily Mail. Un mensaje claro: si al hijo de Carlos III le han hundido los tabloides, el tío de Kate le va a dar dos tazas.

«Está completamente engañado si cree seriamente que lo acercará un paso más a la reconciliación, que dice querer, con la Familia Real. Todo lo que hará es hacer que el abismo entre ellos sea infranqueable», comienza. Tacha a las memorias de «petulantes y egoístas», pero lo que le hace rabiar es que cuente una anécdota tergiversada que no solo involucra a su sobrina, sino también a la hija de esta, la pequeña Charlotte.

En Spare, Harry narra una anécdota de unos días antes de su boda con Meghan Markle. Cuenta que Kate se acercó a la duquesa de Sussex sin considerar el estrés por el que estaba pasando. «El vestido de Charlotte le va demasiado grande, largo y ancho. Se echó a llorar cuando se lo probó en casa», describe Harry que le dijo Kate. Y después añade que esa conversación, la exigencia de una solución provocó a Meghan el llanto.

A Gary esas palabras le parecen muy injustas. «¿Cómo se atrevía Harry a compartir tal confidencia que involucra a un niño pequeño? Cómo tiene la temeridad de hablar de mudarse a los EE. UU. para «proteger a su familia y su privacidad» cuando está preparado para violar la confidencialidad de su sobrina es una hipocresía básica», describe.

Para el tío de la princesa, la anécdota es pura fantasía. «Kate es autosuficiente, ingeniosa y extremadamente capaz», comienza, y sigue: «Proviene de una familia de hacedores y reparadores y tiene un increíble sistema de apoyo en su hermana menor Pippa y su madre, mi hermana mayor Carole, que dirige su propio negocio exitoso. Ha enseñado a sus hijas a afrontar los problemas con calma, sin histrionismo».

En definitiva, Kate se presenta en las memorias como la reina del drama (y no lo es). Con ese arranque, Gary aprovecha para criticarle el resto de actitudes. Le molesta la arrogancia de Meghan cuando dijo que Kate tenía olvidos después del nacimiento del príncipe Louis por culpa de sus hormonas o que Meghan irrumpiera en el primer encuentro informal para abrazar a Guillermo. Y lo más irritante es su excusa favorita, ser estadounidense, y todo lo que conlleva; como pose de hippie descalza con pantalones rotos en su primera cena formal con el heredero y su mujer.

Para concluir, se explaya en juicios sobre el libro. Le parece que las memorias son una rabieta de niño mimado. Percibe que convierte en un problema algo que ha ocurrido toda la vida, que el hermano pequeño se queda con la habitación de menor tamaño. Por eso, le aconseja que mire con qué madurez se comporta la hermana de Kate, Pippa Middleton. Spare ha sentado como un misil hacia sus seres queridos. «¿Su familia lo perdonará alguna vez? Lo dudo», termina.