Luto en mónaco

Muere Fernanda Biffi Casiraghi a los 99 años, la mujer a la que Carolina de Mónaco llamaba mamá: «Se fue tranquila»

La vida de la madre del que fuera segundo marido de la princesa de Hannover estuvo marcada por la trágica muerte de dos de sus hijos.

La princesa Carolina de Mónaco está de luto. / gtres

Jorge C. Parcero
Jorge C. Parcero

La familia real monegasca, y Carolina de Mónaco de manera especial, está de luto. Fernanda Biffi Casiraghi, madre de Stefano Casiraghi, ha fallecido a los 99 años. Así lo confirmaba a el 'Corriere della Sera' su hijo Marco Casiraghi. «Mamá Fernanda ha dejado esta vida, una vida vivida con intensidad y una energía increíble», fueron sus palabras en el diario italiano. Este duro golpe llega cuando su familia estaba preparando una gran celebración para homenajearla por su centésimo cumpleaños.

«Mamá tuvo grandes alegrías y grandes penas, pero fue una mujer que creció durante la guerra y supo afrontar la vida y sus espinas con valentía. Y nos ha dejado a todos ejemplos y recuerdos que nunca olvidaremos», añadía su hijo Marco tras este triste suceso.

Como recuerda su hijo, Fernanda Biffi Casiraghi tuvo que hacer frente a muchos golpes del destino a lo largo de su vida. La trágica muerte de su hijo Stefano Casiraghi a los 30 años tras un accidente náutico fue sin duda el mayor golpe de su vida. Sin embargo, eso no evitó que mantuviera una estrecha relación con su antigua nuera, la princesa Carolina de Mónaco, hasta su muerte.

La vida discreta de la matriarca de los Casiraghi

A Fernanda rara vez se la veía en público, pues prefería su vida retirada en Italia. Pero hubo algunas excepciones a esta norma, como cuando acudió a la boda de Pierre Casiraghi y Beatrice Borromeo en 2015.

Fernanda Biffi Casiraghi, con su hijo Marco en una imagen de 2010. / gtres

Marco Casiraghi dijo que su madre tenía una «personalidad dinámica» y que era una «verdadera matriarca», sobre la que orbitaba la vida su familia. «Le encantaba reunirnos a todos durante las fiestas navideñas, rodeada de hijos, nueras y nietos, porque tenía un gran sentimiento de familia».

Según informa el mencionado diario italiano, fueron precisamente sus nietos y sus bisnietos los que le hicieron un regalo muy especial hace dos años: un perrito spitz miniatura llamado Gioacchino.

«Se fue tranquila, se quedó dormida»

La matriarca del clan Casiraghi residía en la actualidad en Villa Cicogna, situada en la localidad de Fino Mornasco, en la provincia de Como, en Italia. Allí seguía ejerciendo de anfitriona para su familia, en la que siempre incluyó a una Carolina de Monaco que hasta el final la llamó «mamma» y a la que siempre consideró su suegra.

Carolina de Mónaco y Stefano Casiraghi en una imagen de archivo. / gtres

«Yo vivía en Nueva York y luego en Londres, Stefano en Mónaco», ha seguido relatando Marco Casiraghi al 'Corriere'. «Fue difícil, pero ella cuidó mucho de la familia. Hacía días que no se encontraba bien y todos los hijos y nietos estábamos con ella en su casa cuando murió. Pero se fue tranquila, se quedó dormida».

Casada con Giancarlo Casiraghi, que nació un año antes que ella, en 1925, consiguió transformar una empresa de carbón familiar en un imperio financiero e inmobiliario del que fue presidenta honoraria. Giancarlo y Fernanda tuvieron cuatro hijos, Stefano, Daniele, Marco y Rosalba. Solo los dos últimos han sobrevivido a una familia marcada por la tragedia del primogénito.

En diciembre de 2016 fallecía a los 60 años Daniele Casiraghi, quien vivía con su madre en Villa Cicogna, que había sido la antigua residencia del alcalde de Fino Mornasco. Una larga enfermedad acabó con la vida del empresario, como igualmente le había sucedido a su mujer, Laura Sabatini, en 2009.