el padre de shakira, muy enfermo Así es la especial relación de Shakira con su padre William Mebarak Chadid (el hombre que nunca ha hablado ni bien ni mal de Gerard Piqué)

William Mebarak Chadid es uno de los hombres fundamentales de la vida de Shakira (y el único que no se ha manifestado en su ruptura con Piqué).

Shakira posa con su padre, William Mebarak Chadid / Instagram

Silvia Vivas
Silvia Vivas

William Mebarak Chadid, el padre de Shakira (y el motivo por el que la colombiana aún no ha «huido» de Barcelona tras la debacle de su relación con Gerard Piqué ), iba a ser hospitalizado de nuevo en la clínica Teknon-Quirón para someterse a una nueva intervención que mejorara su estado de salud, pero todo lo relativo a su estado de salud está envuelto en un halo de misterio.

No es la primera vez que la salud le juega una mala pasada al nonagenario padre de la colombiana. De hecho, el verso de Shakira en su sesión con Bizarrap «cuando te necesitaba diste tu peor versión» podría aludir a la falta de apoyo que recibió la cantante de Piqué cuando la primavera pasada su progenitor tuvo que ser operado de urgencia.

Su famoso «ataque de ansiedad» tras la hospitalización de su padre se produjo al mismo tiempo que el huracán mediático producido por la infidelidad de Piqué y la separación de mutuo acuerdo de la pareja.

En apenas un año, William Mebarak ha pasado de ser el protector de Shakira que le enviaba ánimos y buenos consejos desde Miami al protegido de su hija y testigo de primera fila de su crisis vital y de pareja.

Pero la biografía de William Mebarak da para mucho más que para hacer un recuento de sus hospitalizaciones actuales, es, sin duda, uno de las personas más importantes en la vida de Shakira (y de los personajes más interesantes del entorno de la cantante).

William Mebarak, el aventurero padre de Shakira (y de ocho hijos más)

Shakira define a su padre en Instagram como una persona cálida y luminosa, «un alma creativa, dueño de una vastísima riqueza literaria e intelectual». Damos fe. Su fiesta de cumpleaños en Miami, cuando cumplió los 90, fue lo más comentado de septiembre de 2020 por el buen rollo y la vitalidad que desprendía William Mebarak en las imágenes.

Discreto (ha habldo más de sus nietos que de su famoso ex yerno), católico y casado en segundas nupcias con Nidia Ripoll, la madre de Shakira, William Mebarak podría presumir si quisiera de haber hecho de todo en esta vida, desde ser periodista a distribuidor de joyas a intentar ordenarse sacerdote e incluso sobrevivir a la bancarrota y a la pérdida de un hijo.

Shakira con su padre, William Mebarak Chadid, y su madre, Nidia Ripoll / instagram

Su familia y exótico apellido provienen del Líbano, pero William Mebarak, en realidad, nació en Nueva York. A partir de los cinco años se crió en Barranquilla, Colombia. Estudió en el Colegio Biffi la Salle y sus maestros fueron los que despertaron en él la vocación por el sacerdocio, pero su padre se lo prohibió y le cambió de colegio.

Por mucho que esa fuera su vocación, la realidad es que William Mebarak se olvidó de la castidad en cuanto empezó a estudiar en un colegio mixto. Tras una primera juventud plagada de fiestas y novietas acabó casado muy joven con Lucila Otero muy joven. Con ella tuvo ocho hijos, uno de los cuales, el mayor, falleció a los 19 años en un accidente de tráfico.

Estando casado con Lucila conoció a Nidia Ripoll, y el viento tuvo la culpa de que se enamorara perdidamente de las piernas de la que sería la madre de Shakira. «Se acabó tu tranquilidad», pensó el padre de Shakira y comenzó un nuevo capítulo de su vida con una nueva mujer. De esa unión, nació Shakira. Su padre, en aquel momento, ya había cumplido 46 años, pero juntos formarían el tandem padre-hija perfecto.

La especial relación de Shakira y su padre William Mebarak Chadid

William Mebarak supo desde siempre que su hija menor, la única nacida de su unión con Nidia Ripoll, tenía madera de artista. A los que le han acusado alguna vez de haber «presionado» a su hija hacia el exigente mundo del arte y el espectáculo, el padre de Shakira les suele recordar que su hija con siete años ya pintaba murales, que a los nueve años ya había escrito 19 baladas y a los 13 tenía un contrato con Sony Music.

La propia Shakira le da la razón a su padre y en alguna ocasión ha explicado que durante toda su infancia lo único que deseaba era «seguirle los pasos» a su padre. Antes de decidirse a pedir una guitarra de regalo de Navidad, prefirió hacerse con una máquina de escribir para hacer lo mismo que él.

Retrato del padre de Shakira, William Mebarak / instagram

Por supuesto, la primera de aquellas 19 canciones iba dedicada a las «gafas oscuras» que su progenitor se ponía para ocultar a su hija los momentos en los que la tristeza le invadía al recordar la muerte de uno de sus hijos.

Gracias al respaldo de su padre, que entendía mejor que nadie la vocación artística de su hija y dejó su trabajo para acompañarla en sus comienzos a Estados Unidos y Brasil, Shakira pudo convertirse en la artista que hoy es.

Y gracias al apoyo de su hija, William Mebarak Chadid cumplió el sueño de su vida a los 80 años: presentar un libro en el Hotel Hilton de Bogotá ante una audiencia en la que se encontraban embajadores de varias partes del mundo e incluso un ex presidente de Colombia, Andrés Pastrana.

Vídeo. Skhakira cambia de look

Un apoyo casi infinito del que todo el mundo fue testigo cuando en la ceremonia de los Grammy Latinos de 2011 la sorpresa de la noche fue ver a William Mebarak cantarle a una emocionadísima Shakira «Es mi niña bonita», la misma canción que le cantaba de pequeña cuando la llevaba a la playa.

En las buenas y en las malas padre e hija han estado siempre unidos, pero no siempre tenían la misma opinión. Shakira no siempre hacía caso a los consejos de su padre sobre sus canciones… ni sobre los rumores.

Cada vez que aparecía un rumor, él intentaba convencer a su hija de que había que desmentirlo, y Shakira le convencía a él de que era mejor dejarlo estar. Definitivamente esa batalla la ha ganado su hija porque la realidad es que al final, tras la ruptura del año, nos hemos quedado sin saber qué opina William Mebarak de su ex yerno Gerad Piqué, ese hombre del que nunca pronunció ni una palabra.