La bodas de la realeza siempre son sorprenden. Suelen estar llenas de una lista interminable de invitados, un banquete real enorme y por supuesto, un vestido de novia con una majestuosa cola. Todos estos clichés los ha roto por completo, Alexandra de Luxemburgo.
La princesa Alexandra de Luxemburgo ha contraído matrimonio con su pareja Nicolas Bagory. La monarca lo tenía claro desde un principio y quería realizar dos bodas: una civil y otra religiosa. El fin de semana del 22 de abril dio el 'sí, quiero' en el ayuntamiento de Luxemburgo. A la cita acudieron muy pocos invitados, entre los que estuvo, por supuesto, los Grandes Duques .
Para la ceremonia civil , la princesa eligió un conjunto muy moderno compuetso por blusa, pantalón y capa. Un look nada esperado que demuestra que es una novia más moderna y que apuesta por la originalidad con diferencia en comparación con otras royals europeas en el día de su boda.
Pero este look, no ha sido el único con el que ha sorprendido la princesa. Y es que como te decíamos, la boda se divide en dos partes. La segunda se ha celebrado el 29 de abril. Una ceremonia religiosa en la iglesia de Saint Trophyme de Bormes-les-Mimosas, en el sur de Francia donde toda la familia suele pasar sus vacaciones.
A la iglesia, la novia ha acudido de la mano de su padre, muy sonriente. En esta ocasión si ha utilizado el clásico velo y lo ha acompañado de una preciosa tiara entrelazada con piedras. A juego con la tiara ha llevado unos pendientes con diamantes y perlas.
La tiara tiene mucha historia y fue realizada por Chamuet. Pertenece a la Gran Duquesa Josegina Carlota de Luxemburgo y a la Gran Duquesa María Teresa de Luxemburgo, quien se la ha otorgado a la princesa Alexandra para la boda. Se trata de una tiara particular porque se puede llevar también a modo de collar y sin perlas.
El toque más original lo ha añadido con su vestido, un diseño en acabado satén con corte ceñido hasta la zona de la cintura y luego con bastante volumen en la zona del bajo para darle un toque de fluidez. El detalle más impactante ha sido el espectacular escote.
El escote del vestido de novia de Alexandra de Luxemburgo es, sin duda, lo que le ha dado más personalidad. Es un escote en pico, cruzado desde la zona alta hasta casi la cintura lo que permite estilizar mucho esta zona del cuerpo. Además, cuenta con hombreras que aportan volumen y realzan el rostro.
A la cita no han faltado los familiares de la novia y el novia. En concreto, hemos visto ya el look que ha llevado la Gran Duquesa, María Teresa de Luxemburgo. La monarca ha querido apostar por una de las tendencias del momento, los detalles flor en prendas de invitada.
Para ello ha lucido un mono negro ceñido con pantalón de pernera ancha y una capa en color verde esmeralda con un detalle flor en un solo hombro. Un accesorio flor muy impactante y con mucho protagonismo. Es un mono de la firma Elie Saab.
Otra de las asistentes a esta boda real ha sido la princesa Clara de Luxemburgo. Al igual que hizo en su propia boda, acudió a la de Alexandra de Luxemburgo con un vestido con encaje y abalorios. Se trata de un vestido precioso de Zuhair Murad en color rojo con escote bardot, mangas acampanadas y fruncido en la cintura.
20 de enero-18 de febrero
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