Existen muchas formas de alimentarnos para seguir una dieta equilibrada y acabar con el efecto rebote de las dietas habituales de adelgazamiento. Lo puedes conseguir con una dieta clean eating o incluso con una crudivegana pero unas son más fáciles de seguir que otras y no todas dan los mismos resultados. Hoy vamos a hablarte de la dieta inversa, un método ideal para evitar el efecto rebote después de realizar un proceso de pérdida de peso.
La dieta inversa es tal como su nombre lo indica, una dieta al revés. ¿Y por qué decimios eso? Porque a diferencia de otras dietas de pérdida de peso, ésta propone aumentar gradualmente el aporte energético diario. Así, comenzamos ingiriendo la cantidad de calorías que necesitamos a diario para ir sumando entre 20 y 30 calorías cada día.
El objetivo de esta dieta es acelerar el metabolismo, ya que al aumentar lentamente la ingesta calórica diaria, aumenta también el efecto termogénico de los alimentos y la eficiencia del metabolismo y, por tanto, el cuerpo quema la energía en vez de almacenarla en forma de grasa.
La dieta inversa está especialmente recomendada para aquellas personas que se han sometido a un déficit calórico que le ha permitido perder peso, pues permitirá retablecer las calorías que el organismo necesita para mantener su peso normal pero sin engordar.
Además de para aquellas personas que se han sometido a una dieta de adelgazamiento, también es aducada para aquellas personas que han pasado una etapa de difinición muscular, en la cual se pretendía quemar grasas y, por tanto, han reducido la ingesta calórica.
Pero este tipo de dieta no es recomendable para todo el mundo. Al tratarse de una forma de alimentarte que requiere de un control preciso de las caloráis que se ingieren, puede generar obsesiones y derivar en trastornos alimentarios o cuadros de ansiedad o estrés.
Del mismo modo, la dieta inversa puede perjudicar a personas sedentarias o con un escaso nivel de actividad física, así como también a quienes tienen sobrepeso, ya que incrementar gradualmente las calorías que se consumen no tendrá ventaja alguna para su salud.
Además, la dieta inversa se centra demasiado en las calorías que consumes sin darle demasiada importancia a la calidad de lo que comes ni a la actividad física que realizas. Y si algo se ha demostrado, que tanto una cosa como la otra también son claves a la hora de acelerar tu metabolismo.
Eso sí, debes tener en cuenta que, aunque esta dieta se base en una cierta lógica por parte de ciertos nutricionistas, no existen estudios científicos que avalen sus resultados, por lo que se recomienda acudir siempre a un profesional que controle tu progresión y, sobre todo, tu salud.