A la hora de decorar nuestra casa no solo es importante escoger muebles con un buen diseño, o detalles elegantes con los que completar una estancia, sino que la elección de la gama cromática es clave. Es lo que marca la composición de cualquier espacio, y que hace que te integres en un estilo u otro.
Por ejemplo, si eres un amante del minimalismo , los colores predominantes serán el blanco o el beige; del industrial, el negro; y si tu preferencia es la estética kitsch, tienes suerte, ya que no hay reglas escritas en este terreno. Pero, si todavía no sabes cuál seguir, estas son algunas de las combinaciones de colores que nunca fallan.
En el sector de la decoración esta frase tiene todo el sentido En este caso el negro y el blanco son la pareja perfecta para aquellas que prefieren un estilo más sobrio, clásico y elegante, que siempre puedes romper con algún mueble de madera o nogal, u optar por otros complementarios más potentes, como puede ser el rosa y el verde, y dar ese toque original.
Si no sigues esa estética extravagante que te mencionábamos con anterioridad, no siempre más es mejor. Escoger tres tonos como máximo es el mejor acierto, que siempre puedes rematar con texturas o materiales que vienen dados de la elección de los muebles que protagonicen la estancia.
El dorado siempre se recomienda en estos casos, si lo que buscas es otorgar a la habitación un aire de sofisticación. Este, lo cierto, es que queda de maravilla con todo lo que te propongas, pero el blanco siempre será un acompañante fiel. Para romper un poco con la línea cromática, puedes meter algún tono potente, pero igualmente elegante, como un azul marino o con reflejos turquesas.
Se adapta a cualquier color que te apetezca. Desde un verde, hasta un naranja o un marrón, la clave del éxito es mezclar varias tonalidades para que haya variedad, aunque sea dentro del mismo color. Es decir, puedes optar por ejemplo por un beige en la alfombra, un tostado para el sofá y un marrón oscuro para la librería.
¿Eres amante de este estilo? Entonces este trío de colores es todo lo que estás buscando. Da ese toque más moderno, que queda de maravilla en cualquier espacio, desde el dormitorio hasta la cocina, y que puedes completar con algún mueble con acabados en metal, para que sea más auténtico.
Con esto hacemos referencia a que siempre se puede alegrar un espacio a través de los pequeños detalles. Si tienes las paredes pintadas de blanco, y la decoración en general es sobria, siempre puedes aportar una pieza llamativa en algún tono potente como el rojo o el amarillo.
Especialmente ahora que la llegada de la primavera/verano es inminente, podemos plantear un cambio en nuestro hogar y darle ese toque mediterráneo tan característico, completando la decoración con piezas artesanales y confeccionadas en materiales como el lino.
20 de enero-18 de febrero
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