Ejercicios fáciles y rápidos para hacer durante el día si trabajas sentada

Trabajar sentada durante muchas horas, tanto si lo haces en una oficina como si lo haces desde tu casa, tiene sus consecuencias. Y es que el sedentarismo es uno de los principales problemas de la sociedad moderna y los trabajos que te obligan a estar en una misma posición hora tras hora debilitan los músculos y articulaciones.

Por eso es vital incorporar una rutina de ejercicios fáciles que puedas hacer durante tu jornada laboral. No estamos hablando de rutinas complicadas para fortalecer el cuerpo, sino de ejercicios simples cuyo objetivo es desentumecer los músculos y evitar posibles dolores.

Este ejercicio está especialmente aconsejado para aquellos que pasan largas horas frente al ordenador. Para realizarlo sólo debes doblar los brazos a 90 grados con las manos estiradas y las palmas hacia el suelo. Después, debes llevar ambas manos hacia afuera y hacia adentro. Además de relajar las muñecas, este ejercicio mejora la flexibilidad.

Una variación que puedes añadir a este ejercicio es el clásico giro de muñecas con los puños cerrados hacia un lado y hacia el otro. Este movimiento, común en rutinas de estiramiento, ayuda a mantener la flexibilidad y prevenir lesiones que pueden generarse por mantener siempre la misma postura, como el síndrome del túnel carpiano.

El cuello es otra zona del cuerpo que sufre las consecuencias del sedentarismo laboral, acumulando tensión y estrés. Para contrarrestar esa tensión, puedes realizar un sencillo estiramiento de cuello que te proporcionará alivio de inmediato y evitará lesiones más problemáticas a largo plazo.

Comienza estirando la espalda y colocando las palmas de tus manos sobre el escritorio. Luego, baja la cabeza en diagonal hacia un lado, sintiendo cómo se estira el músculo del cuello en la dirección opuesta. Repite el movimiento hacia el otro lado y realiza tantas repeticiones como necesites para sentirte relajada y liberar la tensión acumulada.

En la mayoría de rutinas de ejercicios nos olvidamos de los omóplatos, pero esta zona es vital para mantener una buena higiene postural. Al trabajar frente al ordenador es muy común encorvar la espalda hacia adelante, y un ejercicio para activar esta zona puede liberar tensión y evitar ciertos dolores muy molestos.

Comienza estirando completamente la espalda y luego eleva los hombros hacia las orejas. A continuación, llevalos hacia atrás, baja los hombros y muevelos hacia adelante hasta que la espalda se curve completamente. Realiza cada paso lentamente y concéntrate en sentir la tensión en la espalda alta.

Otro ejercicio simple, pero efectivo para contrarrestar los efectos del sedentarismo, es realizar flexiones de rodilla. Este ejercicio ayuda a estimular la circulación sanguínea y a mantener la flexibilidad de las articulaciones de las rodillas, lo cual es esencial para prevenir la rigidez y el dolor.

Siéntate en tu silla con la espalda recta y las manos apoyadas en tus muslos y comienza estirando lentamente la pierna derecha hacia adelante, manteniendo el pie doblado en un ángulo de 90 grados hasta que la pierna esté completamente recta. Sosten esta posición durante unos segundos y luego regresa a la posición inicial. Repite el movimiento con la pierna izquierda y continúa alternando entre ambas piernas.

Caminar durante al menos 5 minutos puede resultar beneficioso tanto para tu salud física como mental. Esto no solo ayuda a restablecer la circulación sanguínea, sino que también contribuye a despejar la mente y reducir la fatiga visual al apartar los ojos de la pantalla y la luz azul.