Estiramientos
Estiramientos
Mantenerte activa es importante en cualquier momento de la vida, pero a medida que pasan los años y, especialmente a partir de los 50, cobra más relevancia que los ejercicios que elijamos estén lo más adaptados posible a la condición física de cada persona. Uno de los ejercicios que mejor encaja con estas edades son los estiramientos, destinados a ganar flexibilidad para garantizar el buen estado de las articulaciones que tan importante es con el paso del tiempo.
Es cierto que l a práctica regular de estiramientos tiene como principal beneficio el aumento de la movilidad de las articulaciones y la reducción de la rigidez muscular, pero no son sus únicos beneficios. Los expertos también aseguran que activa la circulación sanguínea, mejora la postura, incrementa el equilibrio e, incluso, ayuda a quemar calorías.
¿Pero por qué es tan importante ganar flexibilidad a partir de cierta edad? Porque mejora la movilidad y la autonomía, contribuyendo a que las actividades del día a día sean más fácilmente ejecutables. Además, previene las lesiones y reducen el dolor en las articulaciones y la musculatura, algo que puede ser habitual a partir de los 50 si no practicas ejercicio.
1. Estiramiento de cuello: siéntate en una silla con la espalda recta e inclina lentamente la cabeza hacia un lado sin mover el hombro contrario. Mantén la posición durante 15-30 segundos y luego cambia de lado. Este ejercicio ayuda a aliviar la tensión en el cuello y los hombros.
2. Estiramiento de hombros: de pie o sentado, lleva un brazo sobre el pecho y utiliza la otra mano para sujetarlo justo debajo del codo. Mantén la posición durante 15-30 segundos y luego cambia de brazo. Este estiramiento ayuda a mejorar la flexibilidad de los hombros y los músculos del brazo.
3. Estiramiento de brazos y espalda: de pie, levanta los brazos por encima de la cabeza y entrelaza los dedos. Inclínate ligeramente hacia un lado, manteniendo los brazos estirados y mantén la posición durante 15-30 segundos antes de cambiar de lado. Este ejercicio ayuda a estirar los músculos de la espalda y los costados del cuerpo.
4. Estiramiento de piernas: siéntate en el borde de una silla con una pierna extendida y la otra doblada. A continuación, inclínate hacia adelante desde la cadera, manteniendo la espalda recta, hasta que sientas un estiramiento en la parte posterior del muslo. Sostén la posición durante 15-30 segundos y luego cambia de pierna. Este ejercicio ayuda a mejorar la flexibilidad de los músculos de la pierna y la cadera.
5. Estiramiento de pantorrillas: sitúate de pie frente a una pared y coloca las manos en ella a la altura de los hombros. Da un paso hacia atrás con un pie y flexiona ligeramente la rodilla. Mantén el talón del pie trasero en el suelo y empuja la cadera hacia adelante hasta que sientas un estiramiento en la pantorrilla. Mantén la posición durante 15-30 segundos y luego cambia de pierna.
6. Estiramiento de espalda baja: siéntate en el suelo con las piernas extendidas hacia adelante e inclínate lentamente hacia adelante desde la cadera, manteniendo la espalda recta, hasta que sientas un estiramiento en la parte baja de la espalda y los isquiotibiales. Mantén la posición durante 15-30 segundos. Este ejercicio ayuda a mejorar la flexibilidad de la espalda baja y los músculos de las piernas.
7. Estiramiento de cadera: siéntate en una silla con los pies planos en el suelo. Cruza una pierna sobre la otra y lleva el pie contrario hacia el glúteo. Mantén la posición durante 15-30 segundos y luego cambia de pierna. Este ejercicio ayuda a estirar los músculos de la cadera y mejorar la movilidad de las articulaciones.