Mientras esperamos (pacientemente) a que llegue de verdad la primavera , para disfrutar de los mejores rooftops de Madrid , no perdemos de vista todas las posibilidades gastronómicas que nos ofrece la ciudad. Y cuando nos proponemos disfrutar de algo exclusivo e inolvidable, Pilar Akaneya, el restaurante japonés con la mejor carne del mundo, está el primero en nuestra lista.
Y es que no hay nada como degustar platos que llegan directamente desde el país nipón para sentir que estamos un poco más cerca del privilegio culinario. Algo que podemos hacer en el barrio de Chamberí, donde se encuentra este restaurante reconocido con un Sol Repsol. Con el algecireño Pepe Fernández al frente de la propuesta gastronómica, Pilar Akaneya es un sumibiyaki, o barbacoa japonesa, con varios productos premium del país en su carta.
Chiho Murata, presidente y chef ejecutiva del grupo que nació en Fukuroi, se ha encargado del diseño de interiores del restaurante, inspirado en el minimalismo funcional japonés y la estética clásica de Kioto a partir de líneas limpias y colores naturales de materiales nobles como la madera o el hierro. Esta unión de belleza y tradición nos traslada al país nipón para proponernos tres menús degustación en los que la excelencia y la calidad son ingredientes principales.
En dos de sus tres menús se puede disfrutar de la Matsusaka Beef A5 BMS12 de Ito Ranch, una granja en la que solo cuentan con vacas vírgenes, que tienen un temperamento más calmado, algo que hace que su carne sea más tierna. Es el propio propietario, Hiroki Ito, el que expide las licencias para vender su carne, algo que el grupo Akaneya consiguió tras reunirse personalmente con él.
El prestigioso ganadero quiere controlar toda la vida de su producto, que con tanto cariño y cuidado desarrolla a lo largo de meses, y por eso puso especial interés en conocer el proyecto de Pilar Akaneya. Un grupo que cuenta, además de con su restaurante madrileño, con un establecimiento en Barcelona, Carlota Akaneya, en la calle del Pintor Fortuny, 32) y en París, Marie Akaneya, en el número 12 de la Rue Godot de Mauroy, muy cerca de la Place de la Concorde.
La Matsusaka Beef, según Ignasi Elías, director general del grupo, tiene un punto de fusión de 12 grados, y su corte más exclusivo, el solomillo, que solo se puede disfrutar en el menú Sansekai en una mesa en cada servicio, se deshace en la mano. Una excelencia cárnica que impactó al propio Elías, que la primera vez que probó la carne premium sintió «la emoción por un sabor que superaba lo mejor que conocía».
En los tres menús degustación es el comensal el que se ocupa de cocinar la carne, en el primero de ellos Kobe Beef A5 y en los otros dos la comentada Matsusaka. La velada comienza con un delicioso sake de ciruela japonés, una bebida que ya nos anticipa que vamos a vivir una experiencia cuidada hasta el mínimo detalle. Y le siguen deliciosas referencias de la tradición culinaria japonesa, como el edamame de soja a la brasa al estilo Akaneya, su inolvidable sopa de miso de Hokkaido o el cuadril de ternera japonesa con salsa miso ponzu.
Poco antes de que la carne llegue a la mesa, el excelente servicio de Pilar Akaneya comienza a preparar las brasas, para que estén en su punto cuando comencemos a degustar la especialidad de la casa. Para hacerlo, solo tenemos que coger los cortes con las pinzas y seguir las indicaciones de los camareros para disfrutar cada bocado de esta prestigiosa carne como se merece.
El broche de oro a la noche lo pone el Crown Melon, la denominación de origen de muskmelon más prestigiosa de Japón, que tiene un precio de 200 euros. Su sabor dulce, y su precio, se deben a que a mitad de la cosecha el agricultor escoge un único melón de cada planta en la que crecen, y todos los nutrientes y cuidados van dirigidos a él. Otro sabor «made in Japan» que, como la Matsusaka Beef, nos permite viajar con los cinco sentidos y guardar esta vivencia en nuestra memoria. Como en la mejor de nuestras aventuras.
20 de enero-18 de febrero
Con el Aire como elemento, los Acuario son independientes, graciosos, muy sociables e imaginativos, Ocultan un punto de excentricidad que no se ve a simple vista y, si te despistas, te verás inmerso en alguno des sus desafíos mentales. Pero su rebeldía y su impaciencia juega muchas veces en su contra. Ver más
¿Qué me deparan los astros?