La increíble historia de superación del chef David de Jorge: cómo logró perder 140 kilos

Su oronda figura se hizo sinónimo de este dicharachero cocinero nacido hace 54 años en la localidad guipuzcoana de Hondarribia. El chef David de Jorge, compinche habitual del aún más legendario Martin Berasategui y presentador del popular programa de cocina 'Robin Food', llegó a pesar 267 kilos a los 40 años. Pero un día se dio cuenta de que, en sus propias palabras, le iba a «dar un jamacuco» y gracias a una dieta equilibrada, deporte y varias operaciones quirúrgicas logró perder 140 kilos.

No recuerda haber sufrido bullying por su peso de pequeño, cuando aún soñaba ser como Luis Arconada, el portero de la Real Sociedad, o tocar la trompeta como Louis Armstrong. Pero cambió el fútbol y la música por los fogones y se formó en algunos de los mejores restaurantes del mundo. Pero su faceta más conocida ha sido frente a las cámaras, primero en programas para la televisión autonómica vasca y luego en Telecinco o Antena 3.

También destaca por los numerosos libros de recetas que ha elaborado junto a su socio Martín Berasategui –el último se titula 'Cocina y vencerás'– y por su chispa en las redes sociales, donde se define como «el mejor cocinero mediocre de España». Allí se ha creado una fiel legión de seguidores, a los que enamora con sus clásicas «guarrindongadas» que él ya no prueba.

En sus entrevistas tampoco decepciona. Como cuando relató a Cristina Pardo que en una cena de gala con los reyes Felipe y Letizia partió la silla, cayendo al suelo y llamando la atención de todo el mundo. Una pequeña humillación que, lamentablemente, más de una persona con sobrepeso ha vivido, pero que, adornada con «frente a los reyes de España» aumenta su categoría como anécdota.

«Hijo de Marilén y Jorge, hermano de Tati, Elena y Bolo. Mi chica es Eli. Soy el gordo más delgado del mundo«. Con estas frases se define David de Jorge en su perfil de Instagram, siempre con el humor por delante. Un humor que le hizo mucha falta para superar los cinco largos años del proceso de adelgazamiento, que decidió comenzar porque ya había tocado techo en la báscula: debía pesarse en el matadero y se veía obligado a reservar dos asientos cuando viajaba en avión.

Tras vivir, según su propia confesión, en un empacho continuo, el chef vasco logró perder 140 kilos gracias principalmente a tres operaciones quirúrgicas. En 2012 se colocó un balón gástrico, en 2013 se hizo una reducción de estómago y en 2017 una abdominoplastia, para retirar los pliegues de piel que se habían acumulado. Incluso llegó a decirle en broma a un amigo que se dedica a la marroquinería que utilizara esa piel sobrante para una edición limitada de carteras.

«Fue lo más duro, y es que tenía un lío debajo del delantal... La operación duró diez u once horas y me quedó una cicatriz muy complicada que me obligó a seis meses de reposo casi absoluto«, contó sobre esta última intervención en una entrevista con el diario 'La Verdad' en 2019. Convencido de que ahora podría estar en una silla de ruedas o »con una diabetes galopante«, está más que agradecido a los médicos que le han acompañado en todo este proceso.

Tras sus sucesivos pasos por el quirófano, el cocinero trabaja para mantenerse en su nuevo peso. « Me cuido todo lo que puedo y disfruto haciéndolo porque organizo mi compra y mi nevera y mis pucheros y guiso mucho , que es el mejor antídoto contra la enfermedad. Si guisas, vencerás«, contaba a la revista 'Men's Health' sobre su nuevo estilo de vida.

Asegura que no ha dejado el pan, aunque se come solo una tostada integral en el desayuno, y que de cuando en cuando se da alguna alegría gastronómica. Reconoce que ahora está en el mejor momento de su vida. La buena dieta la complementa caminando todo lo que puede, pedaleando en su bici eléctrica y paseando por la orilla de la playa. Resumiendo: «Envejezco con dignidad y mantengo a raya a ese gordo cabrón que tengo dentro y quiere salir todo el rato«.

Mientras tanto, sigue compartiendo sus platos favoritos y sus restaurantes de cabecera en su cuenta de Instagram. Y aunque es un invitado habitual de programas como 'El Hormiguero', es difícil que le veamos pronto en 'MasterChef' , sobre todo porque, según confiesa él mismo, nunca le han invitado.