Lady Gabriella Windsor durante el funeral de su marido. /
Lady Gabriella Windsor ha celebrado este martes 12 de marzo el funeral por la trágica muerte de su marido, Thomas Kingston . El financiero y experto en relaciones internacionales falleció inesperadamente el pasado 25 de febrero en la casa que sus padres poseen en los Costwolds. La noticia se conoció dos días después, y la autopsia ha revelado que la causa de su muerte se debió a un tiro en la cabeza. Un arma fue encontrada junto a su cuerpo.
El servicio religioso, de carácter privado y al que han acudido familiares y allegados, se ha celebrado en la capilla real del palacio de St James, en Londres, y ha contado con la presencia de alguien muy especial: el príncipe Guillermo . Lady Gabriella, prima segunda del rey Carlos III , mantiene una relación muy estrecha con la Familia Real, y la presencia del heredero al trono en este importante y triste evento lo confirma.
También han acudido los padres de la viuda, los príncipes Michael de Kent , quienes están apoyando firmemente a su hija tras este triste acontecimiento. Los restos mortales de Thomas Kingston, fallecido a la edad de 45 años, ya reposan en algún lugar no revelado, y la misa funeral, de aproximadamente una hora de duración, ha estado oficiada por el reverendo canónigo Paul Wright y el ex obispo de Londres Richard Chartres.
A última hora de la mañana de el pasado 12 de marzo ha tenido lugar la misa funeral por Thomas Kingston, marido de Lady Gabriella Windsor. La familia y amigos ha querido despedirle en la más estricta intimidad, aunque empiezan a conocerse algunos detalles. Según ha informado el periódico británico Daily Mail, al acto religioso han acudido unas 140 personas entre las que destaca la presencia del príncipe Guillermo, primo tercero de la viuda y representante de la Familia real.
El príncipe Andrés, Michael de Kent, la princesa Beatriz y Sarah Ferguson durante el funeral de Thomas Kingston. /
El funeral se ha realizado en la capilla real del Palacio de St James, en Londres, y el mismo día en el que la reina Camilla recibía a Matilde de Bélgica para celebrar el acto benéfico Women of the World en el palacio de Buckingham, y en el que la esposa de Carlos III era obsequiada con una muñeca Barbie inspirada en ella misma. El cortejo fúnebre salió del Palacio de Kensington poco antes de las 11:30 de la mañana, y el cuerpo de Thomas Kensington fue incinerado posteriormente y sin que haya trascendido dónde reposarán sus restos.
Estos días se recuerda la historia de amor protagonizada por Lady Gabriella Windsor y Thomas Kingston, quienes se casaron el 18 de mayo de 2019 en el Castillo de Windsor. Fue una de esas celebraciones para recordar, con todos los elementos de una boda royal y por todo lo alto. Y nada hacía presagiar entonces el triste final de este matrimonio que encandilaba a todos cada vez que hacían acto de presencia pública en el lugar que fuera. Incluidos actos oficiales de la Familia Real a los que la prima y esposo del rey Carlos III acudían felices.
El repentino fallecimiento de Thomas Kingston ha supuesto un duro golpe no solo para su viuda y familiares y amigos más cercanos, sino también para la Familia Real británica, a la que le crecen los problemas y las dificultades. A la operación de próstata y posterior diagnóstico de cáncer de Carlos III , que ya está en tratamiento médico, se le suma la desastrosa gestión de la cirugía abdominal de Kate Middleton . Una intervención quirúrgica que sigue siendo un misterio y de la que la Casa Real no ha dado apenas detalles, contribuyendo a que las especulaciones por el estado de salud de la princesa de Gales sean cada vez más rocambolescas.
Lady Gabriella Windsor junto a su marido Thomas Kingston. /
A esto hay que añadirle las únicas imágenes que hemos tenido hasta ahora de la esposa del príncipe Guillermo, dos no oficiales –una, en un coche conducida por su madre Carole y la otra, sentada en la parte de atrás de otro vehículo junto el príncipe Guillermo–, y una oficial que ha sido un verdadero desastre. Nos referimos a la foto con la que la princesa de Gales quiso felicitar el Día de la Madre en Inglaterra el pasado fin de semana y que ha resultado ser una auténtica chapuza al estar manipulada con photoshop de una forma de lo más burda.
Esos detalles saltaron a la vista de millones de observadores que analizaron la foto al milímetro, y varias e importantes agencias de noticias llegaron incluso a retirar la imagen por considerarla manipulada. Al día siguiente, fue la propia Kate Middleton la que pidió disculpas a través de un stories en su cuenta de Instagram, y reconociendo haberla editado sin tener muchos conocimientos. Un metedura de pata que demuestra, una vez más, que la Casa Real está fallando, y mucho, en sus comunicaciones oficiales.