celos kate middleton Por qué se permitieron los ataques brutales a Meghan Markle: a quién protegían en secreto los servicios de prensa de la Casa Real británica

Harry y Meghan formularon duras acusaciones contra la prensa sensacionalista británica y contra el supuesto sistema de reciprocidad que mantiene con la monarquía. En ningún momento acusaron directamente ni al príncipe Guillermo, ni al rey Carlos III. Sin embargo, en varias ocasiones dijeron abiertamente que los ataques contra Meghan respondían a la «agenda» de otros miembros de la familia real, que era una forma de ocultar problemas de otros, sin nombrarlos. ¿A quiénes se refieren Meghan y Harry ? ¿ A quién protegían los servicios de prensa, mientras Meghan aguantaba los ataques de los tabloides?

La respuesta no es difícil de encontrar y probablemente por eso la reconciliación entre Guillermo y Harry está más lejos que nunca. ¿A quién favorecían los ataques? Al propio Guillermo y a su esposa Kate. Con la llegada de Meghan a la familia real, se creó lo que se llamó el equipo de los «Fabulosos 4»: los dos hermanos y sus esposas. Participaron en debates, en presentaciones y compartieron apariciones en público. Los fanáticos de la monarquía estaban entusiasmados.

Meghan parecía encajar a la perfección, traía aire fresco a la Casa Real y el futuro auguraba una colaboración llena de buenos resultados entre los hermanos Windsor. A pesar de los problemas de Meghan con su familia y de algunos rumores –una supuesta discusión entre Meghan y Kate por los vestidos de los pajes nupciales–, el entusiasmo permanecía intacto el 19 de mayo de 2018, cuando el coche de la futura duquesa de Sussex se dirigía a la capilla de San Jorge, en el castillo de Windsor.

El cuento de hadas se rompió poco después. ¿La razón, según Harry y Meghan? El excesivo protagonismo de Meghan en la prensa. Ocupaba las portadas cada día, mientras «otros» miembros y su trabajo quedaban ocultos. ¿Qué otros miembros eran esos? Harry explica cómo los servicios de prensa de la Casa Real se pusieron a trabajar para boicotear ese protagonismo de Meghan. Y ahí empieza la retahíla de comentarios racistas y misóginos y una persecución por el más mínimo detalle contra la Duquesa de Sussex.

La convirtieron en un «chivo expiatorio» y el día a día de los Duques se volvió una guerra entre su servicio de prensa y el de los Cambridge, del que se habían separado previamente. Fuentes de Buckingham y Kensington Palace, sede de los Gales, han declinado hacer comentarios, a pesar de que recibieron un comunicado de la productora de Harry y Meghan. Según buzzfeednews, tanto Lee Thompson, secretario de prensa de Kensington, como Tobyn Andreae, responsable de comunicación de Carlos y Camilla, informan regularmente a un pequeño grupo de medios en un grupo de Whatsapp y les dan instrucciones sobre cómo tratar la información y atribuirla.

Las acusaciones de Harry y Meghan, a pesar de sus contradicciones, no están tan lejos de la realidad. Los servicios de prensa proporcionaron informaciones negativas, según explica en el documental su abogada, Jenny Afia, para tapar otras historias poco halagüeñas de otros miembros de la familia real. Los primeros protegidos fueron Guillermo y Kate, aunque quizá su velada acusación se refiera a otros miembros «seniors» de la Familia Real, como el príncipe Andrés, alejado de sus obligaciones por su madre, tras el escándalo de su relación de abuso con una menor.

Fuentes de Buckingham han asegurado, estos últimos días, que esas afirmaciones son falsas y muestran un actitud paranoica. «Lo único que hicieron los servicios de prensa fue protegerlos antes y después de la boda», aseguran estas fuentes. La consecuencia de estas acusaciones es la «destrucción total», según asegura un experto real en el Daily Mail, de la relación entre Guillermo y Harry.

Tom Bower afirma, además, que esa mala relación da una imagen muy negativa de Gran Bretaña. « Diana estaría anonadada por la deslealtad de Harry, que afecta no solo a Guillermo y al rey Carlos III, sino a todo el país». Una de las afirmaciones que más ha afectado a Guillermo es la de que se casó con Kate «porque entraba en el molde», no porque estuviera enamorado.

Sin embargo, las aseveraciones de los Sussex no están tan lejos de la realidad. La protección de Guillermo y, sobre todo, de Kate significa la protección del futuro de la monarquía británica. Carlos y Camilla consiguieron que la imagen de la reina consorte cambiara radicalmente, tras años de una elaborada estrategia de comunicación, que la convirtió en el mejor apoyo del rey a ojos de la misma opinión pública que antes la había atacado por su supuesta traición a Diana. El trabajo de Guillermo y Kate ha sido igualmente minucioso desde la llegada de la princesa de Gales a la familia.

Es difícil encontrar un comentario negativo sobre la pareja, tras su boda. La imagen de Kate, criticada antes de casarse por no haber trabajado mientras estaba soltera y por mostrar un rol femenino anticuado –su solo interés era el matrimonio y su papel, el de una matriz real, como aseguró la escritora Hilary Mantel, causando cierto escándalo– fue cambiando poco a poco, empezando por sus «outfits» y terminando por las causas que apoya, como la salud mental.

Hoy es, sin duda, una princesa trabajadora. Cuando llegó Meghan, en 2018, Kate estaba embarazada de su tercer hijo, tras cuyo nacimiento se tomó una baja maternal, pero, a pesar de ello, se superó en cuestiones de estilo y retomó su agenda sin apenas cambios. En aquella época, hubo fotos de las dos en Wimbledon que mostraban una total armonía. La buena relación con Meghan era otra de sus obligaciones, y Kate la cumplió a rajatabla, al menos ante los fotógrafos.

Sin embargo, Meghan era una amenaza real para Kate. Mostraba una imagen femenina contemporánea. Activista, feminista, natural y con un estilo «fashion» mucho más moderno, solo era cuestión de tiempo que surgieran las comparaciones y que éstas no fueran favorables a Kate. Su viaje a solas con la reina Isabel II fue todo un éxito. Meghan mostró una gran confianza en su intimidad con la reina. Kate había tenido que esperar años para un encuentro semejante, mientras que Meghan acababa de casarse.

Es cierto que Meghan y Harry han exhibido compromisos con el medio ambiente, por ejemplo, y después han viajado en avión privado. Y que Meghan tenía una cierta inclinación por el lujo francés, pero, ¿Guillermo y Kate no han viajado nunca en vuelos privados? ¿Qué gasta Kate en su vestuario? ¿Y sus numerosos traslados de casa? ¿Alguien ha criticado el dispendio que suponen? La realidad es que ninguna información sobre ella es negativa. Es la perfecta princesa de Gales, un activo que el rey Carlos III no quiere poner en riesgo.