El gesto inesperado de Meghan Markle para reconciliarse con Kate Middleton: «Pueden usar esto como punto de partida»

No es ningún secreto que la duquesa de Sussex y la princesa de Gales no son ahora mismo las cuñadas mejor avenidas . Kate y Meghan han mantenido una tensa relación en los últimos años después de que Harry y su esposa atacaran a varios miembros de la familia real británica en su explosiva docuserie de Netflix. Las incendiarias declaraciones del benjamín de Carlos y Diana en su libro de memorias 'Spare' no ayudaron a calmar las aguas e incluso se dice que la exactriz se está preparando para «dejar las cosas claras» sobre sus años dentro de la monarquía inglesa escribiendo su propia autobiografía.

Dentro de los desencuentros entre Kate y Meghan en los últimos años, se ha publicado que la duquesa de Sussex hizo llorar a su cuñada tan solo cuatro días antes de su boda con Harry. Sin embargo, durante su célebre entrevista con Oprah Winfrey , Meghan dijo que en realidad fue al revés. Entonces la norteamericana admitió que se había sentido «herida» por el trato recibido por parte de Kate Middleton.

Harry explicó la situación en su libro, asegurando que había encontrado a Meghan «llorando en el suelo» después de una discusión con Kate sobre los vestidos que iban a llevar las damas de honor. Al parecer, Kate le dijo a Meghan que había un «problema» con el vestido de su hija, la princesa Charlotte, lo que desembocó en la supuesta discusión.

Pero ahora parece que Meghan Markle estaría dispuesta a dejar lo pasado en el pasado y podría haberse producido algún movimiento entre bastidores tras los recientes problemas de salud de Kate Middleton, que acaba de concluir su quimioterapia . «Meghan se ha puesto en contacto con Kate y Carlos», asegura una fuente del entorno de los Sussex a la revista 'US Weekly'. «Así que se están haciendo movimientos para la reconciliación».

Una segunda fuente añadía que «Meghan apoya a Harry en todo esto, y desea a sus familiares, incluida Kate, lo mejor». Esta persona afirma que la princesa de Gales también estaría «abierta» a la posibilidad de hacer las paces por fin, pero «no se entrometerá» en la fragmentada relación de su marido, el príncipe Guillermo, con su hermano menor.

«Pueden usar esto como punto de partida», continúa diciendo esta fuente. «Están de acuerdo en que la vida es demasiado corta y hay esperanza de que esto lleve a reparar la ruptura». La revista estadounidense asegura también que aunque Meghan no se unió a Harry cuando visitó al rey Carlos en el Reino Unido, ella apoya totalmente su decisión de volver a conectar con su familia.

Una información tan inesperada como optimista que no obstante contrasta con los últimos informes que apuntan a lo imposible de una tregua entre Harry y Guillermo. Según publicaba recientemente el 'Times', la distancia entre ellos es tan grande que al parecer el esposo de Kate Middleton no tiene planes de invitar a su hermano menor a su coronación cuando llegue el momento. Incluso se asegura con fúnebre rotundidad que solo volverán a verse «para el funeral de Carlos III» .

A la espera de que se puedan desvelar más detalles de esta rama de olivo extendida por Meghan Markle, todo está listo para la gran fiesta de celebración en Montecito (California) para los 40 años que cumple el príncipe Harry el próximo 15 de septiembre. Pero ahora también sabemos, según adelanta 'The Sun', que el royal planea escaparse de viaje tras soplar las velas de la tarta.

Harry «disfrutará de una escapada de fin de semana con algunos de sus amigos más cercanos«, publica el diario inglés, asegurando que su esposa y sus hijos se quedarán en casa durante este viaje. Estos nuevos planes llegan diez años después de que el duque de Sussex celebrara su 30 cumpleaños de forma muy diferente: con su hermano y su cuñada Kate en el Reino Unido.

Al mismo tiempo, los 40 años de Harry llegan en un momento en el que crecen los rumores de su supuesta y creciente infelicidad con su vida en Estados Unidos. Sus amigos aseguran que «las cosas no han salido como él quería» y cada vez disfruta más de sus viajes a su país natal. Algo que puede ser problemático para su matrimonio, ya que su esposa parece firme en su decisión de no volver a poner un pie en Inglaterra.