Si hay un problema que nos molesta especialmente es el vientre hinchado. La distensión abdominal suele deberse a problemas digestivos como gases generados por una mala absorcion de algunas sustancias como la fructosa, la lactosa o el gluten. El estrés, comer deprisa y mal, sin masticar o el consumo de bebidas carbonatadas, o alimentos flatulentos son otros de los responsables del vientre hinchado.

Además de comer bien y seguir una dieta apropiada, el ejercicio es el mejor aliado para deshinchar el vientre. Por eso vamos a ofrecerte los mejores ejercicios que deberías practicar si quieres mejorar el tránsito intestinal, y a la larga, notar que la tripa se hincha menos.

Ejercicios de cardio

La falta de ejercicio físico propicia una movilidad intestinal más lenta lo que hace que el vientre se vea más hinchado. Por eso podrías empezar el día con una larga caminata o montando en bicicleta. Lo importante es realizar algún tipo de ejercicio de cardio para acelerar el tránsito intestinal y combatir los gases.

Abdominales con torsión

Acuéstate boca arriba, dobla las rodillas y apoya los pies en el suelo con las manos detrás de la cabeza. Levántate como si fueras a hacer un abdominal estándar, pero al llegar arriba, gira el torso hacia la derecha. Baja y repite el movimiento hacia la izquierda dejando los codos bien abiertos. Los abdominales contribuyen a acelerar los movimientos peristálticos y en este caso, cuando se practican con torsión, el beneficio es mayor.

Postura de la esfinge

Túmbate boca abajo, rota los muslos hacia dentro, apoya los antebrazos a los costados y con las palmas de las manos hacia abajo. Suavemente, eleva el tronco, manteniendo las piernas juntas. Si realizas esta postura lograrás masajear la zona abdominal, además de fortalecer la espalda y el cuello.

Postura del perro boca abajo. / Foto de Elina Fairytale en Pexels

Postura del perro boca abajo

Colócate de pie con los pies separados a la anchura de la cadera, inspira profundamente y eleva los brazos hacia el techo. Al soltar el aire, flexiona la cadera hasta llegar con las manos al suelo. Desde esta posición, da un paso hacia atrás para alcanzar la postura de V invertida, llevando las caderas hacia el techo.

Puedes realizar esta postura como parte del saludo al sol o como ejercicio independiente. Su práctica estira y fortalece la espalda, los isquiotibiales y relaja los músculos abdominales.

Postura de la silla

Colócate de pie, con los pies separados a la anchura de las caderas. Flexiona un poco las rodillas y lleva las caderas hacia atrás como si fueses a sentarte en una silla. Extiende ambos brazos sobre la cabeza y trata de mantener la posición un minuto. Finalmente, inhala y exhala suavemente hasta finalizar el ejercicio.

Este tipo de sentadilla está diseñada para combatir los gases, reducir la inflamación y otros síntomas propios de las molestias digestivas.

Puente

Túmbate boca arriba, con las rodillas flexionadas y la planta de los pies apoyada en el suelo. A continuación, levanta las caderas hacia arriba, sujetando el cuerpo con las manos alrededor de los tobillos. Mantén la pelvis elevada unos 30 segundos y regresa a la posición inicial con un movimiento lento.

Esta postura es la mejor para tonificar el abdomen, las piernas y los glúteos. Su práctica regular disminuye la tensión, el dolor de espalda y los problemas estomacales comunes.